Miami, 12 abr (EFE).- Los dos coacusados en el caso de mal manejo de documentos confidenciales por parte del expresidente estadounidense Donald Trump en su residencia de Mar-a-Lago, en Florida, buscan en una audiencia este viernes que se desestimen los cargos en su contra.
La jueza Aileen Cannon escucha hoy en un tribunal de Fort Pierce, unos 200 kilómetros al norte de Miami, los argumentos de Waltine Nauta y Carlos de Oliveira, asistente personal y administrador de la propiedad de Trump en Mar-a-Lago, respectivamente.
A la vista judicial no acudirá Trump, a quien se le imputan delitos federales de obstrucción y de retención deliberada de documentos oficiales relacionados con la Seguridad de EE.UU., los cuales son punibles con hasta 20 años de cárcel.
Los abogados de Nauta pedirán a la jueza Cannon que desestime el caso por “vaguedad inconstitucional”.
En una moción presentada recientemente, el fiscal especial del caso, Jack Smith, pidió a la jueza Cannon que se le permita responder a los argumentos de Nauta para la desestimación de la acusación, una solicitud que fue aceptada, según consta en el expediente judicial.
Nauta y De Oliveira se declararon no culpables en agosto pasado de cargos de obstrucción a la justicia relacionados con supuestos intentos de borrar imágenes de vigilancia en la residencia del expresidente, después de que Trump hiciera lo mismo en junio de ese año de 37 cargos criminales relacionados con su manejo de materiales clasificados después de dejar la Casa Blanca.
Dado que la acusación “no alega que Nauta actuó de manera corrupta en cualquiera de las conductas alegadas en la acusación, los cargos 33, 34, 35, 40 y 41 deben ser desestimados”, dijo el abogado de Nauta, Stanley Woodward, en un documento que recogió el canal ABC.
“Como lo exigen los estatutos aplicables y como se aplica a Nauta es nulo por vaguedad”, agregó Woodward.
De Oliveira también le pide a la magistrada Cannon que desestime los cargos en su contra.
Sobre Nauta pesa también la acusación de haber mentido al FBI en mayo de 2022, cuando les dijo a los agentes que no tenía conocimiento de las cajas que se trasladaron a la residencia de Trump y que no sabía dónde se habían almacenado antes de ser sacadas de ahí.
La audiencia de hoy se produce una semana después de que Cannon denegara una de las solicitudes de Trump para que se desestimase el caso de los documentos basándose en la Ley de Registros Presidenciales, que, según sus abogados, le permite tener la custodia de los documentos en cuestión y declararlos como registros personales, incluso después de abandonar la Casa Blanca.
Se espera que la jueza Cannon reprograme el inicio del juicio contra Trump, que estaba previsto para el próximo 20 de mayo.