Washington, 10 abr (EFE).- Tres niños migrantes, de miles que fueron separados de sus familias en la frontera de Estados Unidos con México bajo la política migratoria de Donald Trump (2017-2021), han resuelto sus demandas que reclamaban compensaciones por el sufrimiento, indicaron este miércoles fuentes judiciales.
La jueza Margaret Guzmán, del distrito federal de Massachusetts, dio por terminada la demanda después de que los abogados de ambas partes, el Gobierno de EE.UU. y la familia, llegaron a un acuerdo la semana pasada, del cual no se han divulgado detalles.
En su demanda, los menores, que viven en Massachusetts y han sido identificados sólo por sus iniciales, afirmaron que fueron separados de sus familias en 2018 durante varias semanas después que cruzaron la frontera, y que fueron abusados física y verbalmente por agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y de la Patrulla de Fronteras.
Esa separación fue el resultado de una política adoptada en 2017 por el gobierno del entonces presidente Donald Trump y por la cual hasta 2021 más de 5.000 migrantes menores de edad, que habían cruzado la frontera de forma ilegal, fueron puestos bajo custodia del gobierno federal apartados de sus familias.
En enero de 2023 el juez Timoty Hillman, del distrito federal de Massachusetts, dictaminó que los padres y madres de estos niños no podían presentar demandas contra el gobierno, pero los menores sí podían demandar por angustia emocional, arresto falso y asalto físico.
Hillman escribió, en su decisión, que “el daño a los niños fue el objetivo de esta conducta alegada” por parte del gobierno con el propósito de disuadir a otras familias para que no entraran al país.
La demanda alegaba que las familias han sufrido un trauma que alteró sus vidas y causó daño emocional y psicológico extremo, y reclamaba 250.000 dólares en compensación por persona como asimismo la creación de un fondo para el cuidado de la salud mental de los menores.
La semana pasada el gobierno federal indicó a un tribunal federal en Nueva York que aceptaba pagar 65.000 dólares para resolver la demanda presentada por un migrante hondureño que había sido separado de su bebé, según la plataforma legal Law360.
En diciembre el juez Dana Sabraw, del distrito federal del sur de California, prohibió por ocho años la separación de las familias en la frontera con propósitos de disuadir a los migrantes.