Nueva York, 3 dic (EFE).- La defensa del presidente electo Donald Trump pidió este martes que se desestime su caso penal de Nueva York, el único en el que está condenado pero cuya sentencia ha sido pospuesta indefinidamente, y aludieron al polémico indulto del presidente Joe Biden a su hijo Hunter.
En una extensa moción para el juez Juan Merchan, los abogados Todd Blanche y Emil Bove argumentan que Trump fue sometido al mismo “teatro político” que Biden criticó al indultar a su hijo y por eso debería desestimar tanto la acusación de la Fiscalía como el veredicto de culpabilidad que emitió el jurado del juicio.
Biden declaró que su hijo fue “juzgado selectiva e injustamente”, lo que según los abogados supone “una condena extraordinaria del propio Departamento de Justicia” bajo su mando, que ha “coordinado”, dicen, las “cazas de brujas” contra Trump, como este llama a las causas judiciales en su contra.
Según la plataforma judicial, la Fiscalía tiene hasta el 9 de diciembre para responder al nuevo reclamo. Hasta ahora se ha opuesto a que se desestime el caso, pero hace un par de semanas cedió y dejó la puerta abierta a que se posponga la sentencia a 2029, cuando finalice su segundo mandato.
La defensa insistió de nuevo en que se le aplique la sentencia del Tribunal Supremo que concede inmunidad a los presidentes de EE.UU., o que se considere que sus derechos como presidente electo son a estos efectos similares a los de un presidente en ejercicio.
Los abogados, a los que Trump ha nominado para que ocupen altos cargos en su Departamento de Justicia, reiteraron que su estatus de “presidente electo” supone un “impedimento legal a más procesos criminales basándose en la doctrina de inmunidad presidencial”, entre otras cosas.
En noviembre, tras la victoria electoral de Trump, Merchan pospuso indefinidamente la sentencia, que está pendiente desde que un jurado lo condenó en mayo por la falsificación de registros comerciales para silenciar, en su anterior campaña electoral, una supuesta aventura pasada con la actriz porno Stormy Daniels.
El juez Merchan, que originalmente quería dictar sentencia a principios del verano, aceptó retrasarla dos veces después de que la defensa argumentara que tenía inmunidad presidencial según el fallo del Supremo y que su sentencia supondría una interferencia en las elecciones del 5 de noviembre.
Los abogados también aludieron al reciente abandono del fiscal especial Jack Smith de las dos causas penales federales que impulsó contra Trump, por el asalto al Capitolio y por haberse llevado documentos clasificados de la Casa Blanca, como refuerzo de sus argumentos.