París, 8 ago (EFE).- Stephen Curry, el héroe de la semifinal olímpica contra Serbia, con 36 puntos, trató de restar importancia a su prestación personal al señalar que “eso es lo bonito del equipo de EE.UU., cada día es alguien diferente”.
“Hice lo que el partido necesitaba, tenía mucha confianza”, señaló en declaraciones al final del intenso partido que su equipo ganó apuradamente por 95-91 después de ir por detrás durante casi todo el duelo.
Tras acertar 9 de 14 intentos de triple, explicó que metió los primeros tiros y a partir de ahí “cogí el ritmo”. De hecho, suyos fueron 17 de los 23 puntos de su equipo en el primer cuarto.
Curry, reconoció que tras llegar al descanso con una desventaja de 13 puntos, en el tercer cuarto “cambiamos todo, con una gran defensa”.
“Ellos hicieron un gran partido, con grandes tiros en la primera parte (…) pero encontramos la forma de salir adelante”, reconoció sobre los serbios Curry, que a sus 36 años es el mejor triplista de la historia de la NBA y que ha ganado cuatro anillos de la NBA con los Golden State Warriors.