Naciones Unidas, 28 oct (EFE).- Las delegaciones de Cuba y Estados Unidos protagonizaron este martes un tenso encuentro en la Asamblea General de la ONU, donde el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, acusó al embajador estadounidense ante el organismo, Mike Waltz, de “mentir de manera grosera”.
Rodríguez pidió a la presidencia de la Asamblea intervenir mientras Waltz pronunciaba hoy su discurso durante el plenario sobre las sanciones de Washington a la isla: “Estados Unidos no solo miente, desviándose del tema, sino que se expresa de manera grosera y prepotente”, aseveró el canciller.
“(Se expresa) con una incultura, rudeza y grosería que no se admite en este democrático recinto. Esta es la Asamblea General de Naciones Unidas, no es un grupo de Signal ni la Cámara de Representantes”, agregó el ministro de exteriores cubano.
En respuesta, Waltz dijo ser “muy consciente de la ubicación en la que estamos hablando”, y afirmó que esta tampoco es “una legislatura comunista ilegítima en La Habana”.
“Este es un lugar donde hablamos con hechos, y la verdad es que el régimen cubano ha socavado las democracias de nuestro hemisferio. Ha oprimido a su propio pueblo y le roba para que, cito textualmente, los miembros del régimen puedan mantener su estatus de élite”, señaló el representante estadounidense.
Además, haciendo referencia al comentario de Rodríguez sobre Signal, agregó que no necesita pronunciar estas palabras “en ningún tipo de chat”: “Lo digo ante todo el mundo, y es bien sabido en el hemisferio occidental por aquellos que prestan atención”.
La Asamblea General de la ONU celebra hoy y mañana un debate y posterior votación de su resolución no vinculante sobre el bloqueo (embargo) por parte de Estados Unidos.
Los presidentes de Estados Unidos y Argentina, Donald Trump y Javier Milei, podrían agrietar la casi unanimidad que Cuba había amasado en la Asamblea General de la ONU en contra de las sanciones de Washington a la isla, según fuentes diplomáticas consultadas por EFE.


