San Antonio (EE.UU.), 16 jul (EFE).- El senador de Ohio JD Vance, elegido ayer como la fórmula vicepresidencial de Donald Trump para las elecciones del próximo cinco de noviembre, es uno de los representantes del ala más extrema del partido republicano y ha sido especialmente crítico con la migración hacia EE.UU.
El legislador, de 39 años, ha abrazo la misma línea proteccionista y nacionalista de Trump en 2016, señalando que ve la llegada de trabajadores extranjeros como una amenaza para el mercado laboral estadounidense.
“La migración trae mano de obra barata al país, lo cual ejerce presión en toda una serie de servicios, desde la hostelería hasta la vivienda”, señaló el ahora número 2 de Trump en una entrevista con el diario The New York Times publicada en mayo.
“No es bueno que reemplacen a un trabajador de McDonald's nativo de Middletown, Ohio, que gana 17 dólares la hora con un inmigrante que gane 15 la hora”, insistió.
Desde su entrada al Capitolio como senador en 2023, Vance ha redactado o promovido varios proyectos de ley para limitar la entrada de migrantes al país, al igual que imponer consecuencias penales a las personas que viven en EE.UU. en situación irregular.
Las propuestas incluyeron obligar a las personas que quieran entrar a Estados Unidos con un visado temporal a pagar entre 5.000 y 10.000 dólares de “fianza”, imponer un sistema nacional de verificación de estatus legal, para que ninguna compañía pueda contratar a personas indocumentadas, o limitar el uso de un permiso humanitario de entrada al país.
El republicano, a su vez, ha contribuido a popularizar una teoría de la conspiración antimigrantes conocida como “el gran reemplazo”.
Este postulado, que tiene sus orígenes en una novela francesa de inicios de los 70, señala que las élites demócratas están promoviendo la llegada de migrantes a EE.UU. para “reemplazar” o eliminar el poder político y cultural de las personas anglosajonas.
Diferentes vertientes de esta teoría comenzaron a popularizarse desde la llegada de Trump al 2016 y han sido replicadas no solo por Vance, sino también por otros políticos republicanos – incluyendo el expresidente- y figuras mediáticas conservadoras como el presentador de Fox News Tucker Carlson.
Vance ha mencionado explícitamente esta teoría conspirativa en múltiples ocasiones.
“Los medios nos llaman racistas por querer construir el muro de Trump, pero las políticas de frontera abierta de Biden (…) han traído ha más votantes demócratas a este país”, dijo Vance en un anuncio de su campaña al Senado en 2023.
Apoyo a la agenda de Trump
Tras conocerse la elección de Vance como fórmula vicepresidencial, varios grupos a favor de restringir la migración al país celebraron la decisión, asegurando que el republicano ayudará a “cumplir las promesas” de Trump.
El exmandatario ha señalado que, de ser elegido, continuará con la construcción del muro fronterizo, prohibirá la entrada de cierto tipo de migrantes al país y llevará a cabo la “mayor operación de deportación” de la historia.
En una entrevista con Fox News, poco después de haber sido elegido como número 2, Vance expresó su apoyo a la idea de deportar a los más de 11 millones de personas que viven sin estatus legal en EE.UU.
“Debemos deportar a las personas que han roto las leyes y que vinieron al país”, subrayó, “debemos empezara con los criminales violentos”.
Grupos en defensa de los derechos humanos y demócratas han expresado ya su preocupación por la elección de Vance.
“El expresidente tenía la opción de elegir a alguien más moderado (…) y esto solidifica su toma de posesión completa sobre el Partido Republicano”, señaló la congresista por el estado de Texas, Verónica Escobar, en una llamada con periodistas.