Toronto (Canadá), 18 mar (EFE).- Canadá comprará a Australia un avanzado sistema de radar de detección temprana que permitirá alertar de potenciales amenazas procedentes de Rusia y China en las regiones árticas del país, anunció este martes el primer ministro canadiense, Mark Carney.
Carney realizó el anuncio en Iqaluit, la capital del territorio canadiense septentrional de Nunavut, donde llegó este martes procedente de Europa tras reunirse con el presidente francés, Emmanuel Macron, en París y posteriormente con el primer ministro británico, Keir Starmer, y el rey Carlos III de Inglaterra en Londres.
La compra del radar y su operación durante 20 años tendrá un coste de unos 6.000 millones de dólares canadienses (4.195 millones de dólares estadounidenses o 3.833 millones de euros).
Carney también anunció otras inversiones para reforzar la soberanía canadiense en el Ártico, incluidos 420 millones de dólares canadienses (243 millones de dólares o 268 millones de euros) para que las fuerzas armadas del país estén desplegadas durante todo el año en la región, en un momento que no sólo los tradicionales rivales de Canadá desafían al país sino también su principal aliado, Estados Unidos.
Desde que llegó al poder el 20 de enero de 2025, el presidente de EE.UU., Donald Trump, ha lanzado una guerra comercial contra Canadá y ha amenazado con anexionar el país, declarando que la frontera entre los dos países es una línea “artificial” creada en el siglo XIX.
En este sentido, al anunciar las inversiones en el Ártico, Carney se refirió a los desafíos a los que se enfrenta Canadá en un “mundo cambiante”.
“Nuestros adversarios cada vez están más envalentonados. Las instituciones y normas internacionales que han mantenido a Canadá segura ahora están siendo cuestionadas. Las prioridades de EE.UU., en el pasado estrechamente alineadas a las nuestras, están cambiando”, explicó.