Toronto (Canadá), 23 jun (EFE).- El Gobierno canadiense se comprometió este jueves a aumentar el número de funcionarios en las oficinas de emisión de pasaportes de todo el país, especialmente en Montreal, donde centenares de personas están acampadas a la espera de conseguir el documento que les permita viajar al extranjero.
El Gobierno aseguró en un comunicado que ha añadido 600 trabajadores dedicados a atender al público que solicita pasaportes y que en los próximos días añadirá otros 600. Además, funcionarios de diversos ministerios han sido reclutados para acelerar el proceso.
La medida se produce mientras centenares de personas siguen acampadas frente a una de las oficinas de pasaportes en Montreal a la espera de conseguir su turno para obtener el documento.
Medios locales señalaron hoy que las largas esperas están provocando altercados entre las personas que se acumulan en las puertas de la oficina y que, a principios de la semana, la Policía tuvo que intervenir para evitar incidentes más graves.
La tensión aumentó este jueves cuando el Gobierno canadiense anunció cambios para dar prioridad a los viajeros que necesiten pasaportes en las próximas 24 a 48 horas y anuló el sistema de citas que funcionaba hasta ahora.
El principal grupo de la oposición, el Partido Conservador, ha solicitado una sesión de emergencia en el Parlamento para abordar este asunto.
El Ejecutivo canadiense alega que el fin de las restricciones por la pandemia ha provocado un aluvión de solicitudes de pasaporte, pero también reconoció que no había anticipado el volumen de peticiones que está experimentando.
La ministra de Familias, Infancia y Desarrollo Social, Karina Gould, declaró este jueves que el 85 % de las solicitudes de pasaporte son de personas que nunca lo han tenido en el pasado y que el 43 % son menores, lo que complica el proceso de emisión.