Washington, 5 may (EFE).- La incidencia del cáncer uterino ha estado aumentando durante años en Estados Unidos, y la tasa de incremento es más alta entre las mujeres hispanas, según un estudio que publica este jueves la revista JAMA Oncology.
El cáncer uterino es la forma más común, y la segunda más mortífera, de cáncer ginecológico en Estados Unidos, y se calcula que este año se diagnosticarán 65.950 casos y habrá 12.550 muertes por esa enfermedad.
El estudio internacional lo encabezó Megan Clarke, del Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos y en él participaron Susan Devesa de la Universidad Aarhus y Anne Hammer del Hospital Regional Jutland Oeste, ambas en Dinamarca.
Las investigadoras señalan que hacia 2040 el cáncer uterino sobrepasará al cáncer colorrectal como el tercer tipo más común de cáncer y la cuarta causa de muertes por cáncer entre las mujeres.
Para su análisis, Clarke y su equipo consideraron los casos de 208.587 mujeres a quienes se les diagnosticó cáncer uterino entre 2000 y 2017, y en ese contingente hubo 23.096 latinas, el 11 % del total.
En el grupo se incluyeron 149.206 mujeres blancas (71,5 %); 20.302 afroamericanas (9,7 %) y 15.983 asiáticas (7,7 %), indicó el artículo.
En el período estudiado hubo 16.797 muertes causadas por el cáncer uterino, esto es una tasa de mortalidad de 15,7 por cada 100.000 personas.
Entre todas las mujeres las tasas de mortalidad por cáncer endometrial subieron un 1,8 % en el período estudiado, y por cáncer no endometrial subieron un 2,7 %.
Pero mientras que las tasas de carcinoma endometrial se mantuvieron estables, las tasas de mortalidad por carcinoma no endometrial registraron incrementos que fueron mayores entre las latinas con una tasa del 6,7 %, comparada con una del 3,5 % entre las afroamericanas, el 3,4 % entre las asiáticas y el 1,5 % entre las mujeres blancas.
“Las tasas crecientes de mortalidad por cáncer no endometrial corresponden con las tendencias recientes de incidencia de estos subtipos agresivos que han estado aumentando en las últimas dos décadas”, apuntaron las investigadoras.
“Nuestro análisis mostró notables desigualdades en las tasas de mortalidad por cáncer uterino”, añadieron.