Miami (EFE), 22 jul (EFE).- Defensores de los derechos civiles, activistas comunitarios y legisladores estatales de Georgia exigieron este martes la liberación del periodista salvadoreño Mario Guevara, que permanece bajo custodia de las autoridades migratorias de EE.UU. a pesar de que un juez otorgó su liberación bajo fianza.

En una conferencia en el Capitolio del Estado de Georgia más de una docena de líderes locales y estatales han pedido a la Casa Blanca que libere al comunicador arrestado el pasado 14 de junio mientras cubría una protesta en contra de los operativos de Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés).

El senador estatal Joshua Ivan McLaurin dijo en la conferencia que la detención del periodista plantea preocupaciones “mayores” sobre la protección de los derechos civiles y constitucionales en el país, así como la libertad de expresión y de prensa.
“No se trata de si se está de acuerdo con las opiniones de alguien ni con la esencia de su reportaje, se trata de su derecho a recopilar información y difundirla”, insistió el legislador demócrata.
En ese sentido, José Zamora, director del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, en inglés) advirtió que Guevara “fue castigado” por ejercer su profesión y nunca debió ser detenido.
“Es ahora el único periodista encarcelado en Estados Unidos en represalia directa por hacer su trabajo informativo”, enfatizó Zamora.
Guevara fue acusado por la policía de la localidad de Doraville, en el noreste de la zona metropolitana de Atlanta, de caminar en la vía vehicular, obstrucción a un agente del orden público y reunión ilícita, a pesar de que estaba plenamente identificado como miembro de la prensa cuando cubría para su canal MG News la protesta “No Kings”.
El reportero también fue acusado en el condado vecino de Gwinnett por manejo imprudente y otros cargos menores por un incidente ocurrido en mayo.
Las acusaciones en las dos localidades fueron desestimadas, pero su caso de deportación ha continuado.
Un juez de inmigración aprobó a comienzo de julio una fianza de 7.000 dólares para que el comunicador pueda pelear su caso en libertad. Sin embargo, ICE apeló la decisión del juez.
El salvadoreño, quien ha estado detenido en cinco prisiones distintas, alega que es víctima de una persecución por ejercer su “trabajo periodístico al cubrir los operativos en las calles”.