Washington, 7 jul (EFE).- Cinco hombres, incluidos un agente y un ex agente migratorios, fueron acusados en EE.UU. de varios crímenes para acallar a opositores chinos, entre ellos el espionaje y destrucción de obras de un artista de ese país, informó este jueves el Departamento de Justicia.
Un jurado investigador Nueva York los acusó de un “plan de represión trasnacional contra residentes de Estados Unidos cuyas opiniones y actividades políticas disgustan al gobierno de la República Popular China”.
“Entre otros incidentes, estos acusados presuntamente conspiraron para destruir las obras de arte de un ciudadano chino que reside en Los Ángeles y ha criticado al gobierno de China”, señaló el comunicado.
Esos agentes “plantaron equipos de vigilancia en el sitio de trabajo y el automóvil del artista para espiarlo, a nombre de China”, agregó.
Los acusados fueron identificados como Fan “Frank” Liu, de 62 años, Matthew Ziburis, de 49, quienes fueron arrestados, y Qiang “Jason” Sun, de 40, quien está prófugo.
La demanda judicial incluye también a Craig Miller y Derrick Taylor como cómplices.
Miller, quien ha trabajado por 15 años para el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), estaba asignado como oficial de deportaciones en Minneapolis (Minnesota), y Taylor es un oficial retirado de esa misma agencia federal que trabajaba como investigador privado en California.
Ambos fueron acusados de destruir evidencias después que agentes de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) les pidieron detalles de sus trabajos, incluida la diseminación de información confidencial de un banco federal de datos.
“Defenderemos los derechos de las personas en Estados Unidos a expresarse libremente, incluidas las opiniones que el gobierno de la República Popular China quiere silenciar”, afirmó el subsecretario de Justicia, Matthew Olsen.
“Según los cargos, estos individuos ayudaron a agentes de un gobierno extranjero en un esfuerzo para suprimir las voces disidentes que han buscado refugio aquí”, agregó.
De ser condenados, Liu podría enfrentar una sentencia de 30 años de prisión, Biburis, Sun y Taylor, de hasta 25 años, y Miller de 20 años.