Redacción EFE News, 9 jun (EFE).- Nate Paul, un desarrollador inmobiliario de Austin (Texas) ligado a las investigaciones contra el fiscal estatal Ken Paxton, fue acusado este viernes de ocho cargos federales relacionados con hacer declaraciones falsas a instituciones financieras.
Paul, de 36 años, supuestamente infló sus activos y reportó menos responsabilidades financieras para obtener préstamos de manera fraudulenta, según la acusación federal citada por el periódico The Texas Tribune.
El nombre de Paul ha sido vinculado con las denuncias que generaron un juicio político contra Paxton, quien fue suspendido de su cargo como fiscal general de Texas mientras afronta el proceso.
Paxton supuestamente intervino en un litigio en beneficio de Paul, le dio acceso a información confidencial y le pidió que contratara a una mujer con la que Paxton tenía una relación extramarital, a cambio de “favorables condiciones legales”, según información citada en el caso contra el fiscal.
No obstante, en la audiencia de formulación de cargos contra Paul en ningún momento se nombró a Paxton, citó el periódico texano.
Por su parte, el abogado de Paul, Gerry Morris, dijo a medios que los cargos contra su cliente no tienen nada que ver con Paxton.
Paxton espera un juicio político en su contra por acusaciones de soborno, abuso de confianza pública e incapacidad para desempeñar el cargo, entre otras.
Cercano a la figura del expresidente Donald Trump, Paxton ha estado bajo investigación del FBI durante varios años por presuntamente usar su oficina para ayudar a un donante y está acusado de fraude, delito por el que todavía no ha sido juzgado.
Elegido en noviembre pasado para su tercer término en la Fiscalía de Texas, el fiscal suspendido ha sido uno de los combatientes legales más destacados del Partido Republicano y en 2020 fue uno de quienes pidieron a la Corte Suprema de Estados Unidos revocar la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020 frente a Trump.
El juicio político contra Paxton comenzará a más tardar el 28 de agosto. El juicio político es un proceso por el cual se cuestiona la integridad o la capacidad de alguien que desempeña un cargo público.
Solo dos funcionarios en los casi 200 años de historia de Texas han sido llevados a juicio político: un gobernador en 1917 y un juez de distrito en 1976.