Ciudad de México, 18 feb (EFE).- “En México existen canciones de bandas de rock de este país que son muy populares y eso no es poca cosa porque el ‘rocanrol’ es parte importante del entendimiento de la sociedad mexicana”, dijo en una entrevista con EFE el periodista y escritor Alejandro González Castillo.
“La gente en México dice que el rock es chafa (malo), pero hay canciones que están en el imaginario y forman parte de nuestra idiosincrasia como mexicanos”, añadió el autor del libro “200 discos chingones del rocanrol mexicano” (Rhythm & Books 2022).
Precisamente uno de los objetivos del libro, que lleva un título más que mexicano y que González Castillo coordinó junto con su colega David Cortés, es apuntar que el rock mexicano ha dado materiales importantes a la música mexicana “dignos de un análisis serio y riguroso”.
“Un ejemplo es el disco ‘Valedores juveniles’ de la banda el Haragán y compañía, es impresionante el arraigo que ese cancionero tiene en México a nivel popular, te subes al metro y escuchas ‘Él no lo mató’ y es una canción tan popular como una de José Alfredo Jiménez”, contó el autor nacido en Ciudad de México en 1975.
UNA ESCENA MUSICAL QUE EVOLUCIONA
Con un antecedente de hace una década llamado “100 discos esenciales del rock mexicano. Antes de que nos olviden”, ambos autores, especialistas en la materia, descubrieron que habían cambiado algunas cosas en la escena del rock de este país y retomaron ese primer volumen para mejorarlo.
“Duplicamos el número, nos decían que era un despropósito pensar en 100 discos esenciales del rock mexicano y dijimos: pues ahora van a ser 200 y no van a ser esenciales sino chingones (buenísimos), una palabra muy mexicana, que es un vocablo contundente y categórico”, apuntó Castillo.
El Diccionario Breve de Mexicanismos de la Academia Mexicana de la Lengua apunta como significado de chingón o chingona “excelente en alguna actividad o rama del saber”.
“Cuando en México te dicen que algo está chingón, no lo dudas y en la introducción justificamos a qué nos referimos con chingones, cada uno de los álbumes tiene una justificación a nivel periodístico muy claro”, señaló González Castillo.
ROCK MEXICANO CON VALOR ESTÉTICO Y SOCIAL
Las obras, dijo, se abordaron a nivel estético, a partir de sus bondades sonoras, pero también en el contexto social, económico y político en el que nació cada placa porque eso determina su importancia también a nivel lírico.
Además de sus letras, la portada y el productor, es decir, todos los factores que integran un trabajo discográfico fueron analizados.
“Y todos ellos nos llevaron a entender por qué cada disco es chingón”, expuso.
Incluso, contó que las ventas fueron otro factor importante. “Existen discos que vendieron 50 copias, pero hay otros que tuvieron ventas millonarias y por solo ese hecho son chingones”, apuntó.
El libro ofrece 200 reseñas de propuestas musicales surgidas en México durante las últimas seis décadas, dentro de los diversos géneros que integran la escena del rock mexicano.
Están escritas por músicos, melómanos y periodistas, entre quienes destacan varias mujeres.
González Castillo, quien ha escrito en las principales revistas especializadas en música del país, señaló que el libro “permite redimensionar y darle la dignidad que se merece a una historia de resistencia, que es la del rock mexicano”.
Recordó que esa escena la formaron un puñado de rebeldes que no encajaron nunca en la sociedad y que optaron por decir las cosas a su manera.
“Con el libro tratamos de redignificar toda esa historia inmensa y ponerla en el lugar que se merece para que como sociedad crezcamos y entendamos de qué estamos hechos”, expresó.
“En México el ‘rocanrol’ nace de la hibridación y había la intención de apropiarse de un género que nos era ajeno. Desde su germen el rock siempre quiso ser mexicano, para la juventud de ese momento era importante tener una voz propia”, apuntó Gonzalez Castillo.
El libro abre con el disco titulado “Rock” (1960) del grupo Los Locos del Ritmo y cierra con “Belmont” (2022), del cantautor y músico Lázaro Cristóbal Comala.
Entre ambos trabajos los diversos autores recorren con sus reseñas las dos centenas de discos tanto de bandas estelares como Caifanes, Maldita Vecindad, Café Tacvba, Panteón Rococó o Maná “la banda mexicana más conocida en el extranjero y con récords de ventas”.
Así como de otras bandas mexicanas menos populares, pero no menos importantes como El Personal, Cabezas de Cera, Ansia o Sangre Asteka, entre muchas otras de distintos géneros.