Tucson (AZ), 7 oct (EFE).- El expresidente estadounidense Donald Trump llega este fin de semana a Arizona a dar su respaldo a la candidata republicana a la gobernación, Kari Lake, que se encuentra en una reñida contienda con la demócrata, Katie Hobbs, y con la que se disputa el voto latino.
De acuerdo con las más recientes encuestas ambas candidatas están empatadas en la preferencia de los votantes. Ambas cuentan con el 49% a su favor, por lo que el voto de los latinos y de los votantes independientes podría ser crucial para definir esta contienda.
Esta semana ambas participaron en eventos convocados por grupos y organizaciones latinas donde presentaron sus propuestas en temas como la economía y la seguridad en la frontera.
A casi un mes de las elecciones ambas candidatas buscan también atraer el voto latino por medio de mensajes en las redes sociales y medios de comunicación.
Tratando de dar el impulso que requiere la campaña de Lake, Trump liderara un evento en Mesa (Arizona) este domingo (9 de octubre) donde llevara a cabo un acto publico para tratar de impulsar el voto conservador republicano.
Lake, ex presentadora de televisión, es una fiel seguidora de Trump y ha cuestionado la legalidad de las elecciones presidenciales del 2020, así como se opone al derecho al aborto.
Una de las grandes diferencias entre ambas candidatas es su postura ante el tema de la seguridad de la frontera. Lake asegura que mantendrá la promesa de Trump y continuará con la construcción del muro fronterizo, enviará más soldados de la Guardia Nacional para resguardar la frontera y establecerá cooperaciones con otros estados.
Mientras tanto, Hobbs asegura que se debe de emplear tecnología de punta para vigilar la frontera, brindar ayudar humanitaria a los inmigrantes que son liberados por la Patrulla Fronteriza, y dejar la seguridad de la frontera y la aplicación de las leyes migratorias en manos del gobierno federal.
De acuerdo a la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados (NALEO) en Arizona hay aproximadamente 1,2 millones de latinos elegibles para votar, lo que representa una cuarta parte del total de electorado.
Durante las últimas dos décadas el Partido Republicano ha tenido un dominio total del estado, ocupando la gobernación y siendo la mayoría en la legislatura estatal. Sin embargo, el partido tuvo un revés en las elecciones del 2020 cuando Trump perdió el estado.
La última gobernadora demócrata que tuvo Arizona fue en el 2002 cuando fue electa Janet Napolitano.