Los Ángeles, 28 sep (EFE).- Padres de víctimas del tiroteo de la Primaria Robb en Uvalde (Texas) continuaron este miércoles una protesta para exigir la suspensión de los oficiales de la policía escolar que respondieron al tiroteo del pasado 24 de mayo.
Gloria Cazares, madre de Jackie Cazares, y Brett y Nikki Cross, guardianes legales de Uziyah García, continuaron este miércoles su protesta frente a las oficinas del Distrito Escolar Independiente Consolidado de Uvalde (UCISD), iniciada el martes por la mañana.
Los padres de las víctimas pretenden presionar al superintendente del UCISD, Hal Harrell, para que suspenda a los oficiales que permanecieron en el pasillo de la escuela durante 77 minutos antes que el pistolero, Salvador Ramos, fuera abatido.
Ramos asesinó a 19 niños y dos maestras.
La matanza desató una ola de críticas por la falta de acción y coordinación de la policía escolar, los agentes de Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) y los otros agentes que respondieron al tiroteo.
Según una investigación de la Cámara de Representantes de Texas, 376 agentes de diversas agencias de la ley respondieron al tiroteo antes de que mataran al atacante.
Los oficiales tenían pistolas, rifles y chalecos antibalas, pero aun así esperaron más de una hora para confrontar a Ramos, de 18 años.
Cinco oficiales de UCISD respondieron a la escena.
En un vídeo en su cuenta de Twitter, Brett Cross dijo hoy que no terminarán con la protesta hasta que Harrell tome medidas. “Han pasado 18 semanas desde que nuestros hijos fueron asesinados y no han hecho nada”, declaró.
Advirtió que esos policías de UCISD aún están trabajando en las escuelas, y que deberían ser suspendidos.
Las frustraciones de los padres aumentaron cuando UCISD canceló una reunión en el ayuntamiento que estaba programada para la próxima semana, según un mensaje compartido por Cross en las redes sociales.
“Se niegan a hacer cualquier cosa. Pueden entrar aquí y actuar como si trabajaran, pero sabemos que no están trabajando porque no están haciendo nada”, reiteró el hombre en el vídeo, en el que se ve un campamento improvisado.
“Todavía estoy aquí y no me iré a ningún lado”, agregó.
El jefe de la Policía Escolar de Uvalde, Pete Arredondo, fue despedido en agosto pasado.
Mientras, el DPS solicitó una investigación formal contra cinco de sus oficiales que respondieron al mortal tiroteo, dos de los cuales ya fueron suspendidos.