San Juan, 28 sep (EFE).- El multimillonario empresario puertorriqueño Orlando Bravo realizó una aportación de 10 millones de dólares para, según dijo a Efe, “restaurar entre 3.000 y 3.500 hogares” devastados por el paso del huracán Fiona en Puerto Rico.
“Los queremos ayudar a regresar tan pronto sea posible a sus hogares, necesitan mattress (colchones), camas, cocinas nuevas, neveras nuevas, todas las cosas fundamentales”, explicó el empresario, que impulsa esta iniciativa a través de su fundación Bravo Family Foundation.
El magnate boricua, fundador y socio director de Thoma Bravo, una firma de capital privado, indicó que esta ayuda irá dirigida fundamentalmente a mayores de 65 años, madres que viven solas con sus hijos y personas que necesitan asistencia médica.
Tras el impacto de Fiona el pasado 18 de septiembre en la isla, los esfuerzos de esta fundación creada en 2018 se centran en los municipios puertorriqueños de Mayagüez, Salinas, San Germán, Cayey, Loíza y Cabo Rojo.
A través de la colaboración con alrededor de 150 voluntarios y líderes comunitarios, la fundación está repartiendo los suministros necesarios entre los afectados por las inundaciones de Fiona.
“Esos líderes nos ayudan a hacer el recorrido de los vecindarios a conocer los hogares, a hacer el censo y nos ayudan a repartir”, aseguró Bravo en su entrevista con Efe.
Puerto Rico se ha visto afectado por diversos huracanes en su historia reciente. En 1998, Georges, de categoría 3, azotó la isla y, en 2017, el huracán María, que alcanzó categoría 5, causó cerca de 3.000 muertos.
Tras el impacto del devastador huracán María, la Bravo Family Foundation brindó también asistencia a las comunidades damnificadas.
Para Bravo, hay una diferencia crucial entre la ayuda entregada ahora y la que se brindó hace cinco años: “Lo que es muy diferente es que la ayuda de María era una ayuda inmediata”.
Sin embargo, tras el paso del huracán Fiona, la respuesta es más “programada”, la fundación está realizando un censo, casa por casa, para ver las necesidades que tiene cada familia.
Asimismo, Bravo resaltó la solidaridad entre los vecinos que, según comentó, siempre surge tras desastres naturales de estas características.
Bravo inyectó en 2018 una contribución de 100 millones de dólares a su fundación para impulsar varios programas en Puerto Rico, entre los que destaca la asistencia a jóvenes puertorriqueños para emprender nuevos negocios en la isla.
“Una sociedad que no crea negocios nuevos, donde no hay negocios pequeños no puede crecer, las compañías grandes no son las que dan el crecimiento”, sentenció Bravo.
Bravo Family Foundation en una organización privada sin fines de lucro comprometida con las comunidades, personas y grupos marginados que tienen acceso limitado a oportunidades de aprendizaje de alta calidad, conocimientos técnicos y apoyo financiero.