Washington, 15 sep (EFE).- El estado estadounidense de Indiana se convirtió este jueves en el primer territorio del país en el que entra en vigor una ley contra el aborto redactada y aprobada tras la decisión del Tribunal Supremo de eliminar la protección constitucional a la interrupción del embarazo.
La ley prohíbe todos los abortos salvo en algunas excepciones, como en casos de violación, incesto, o cuando existen complicaciones médicas.
Varios estados de EE.UU. aprobaron diferentes restricciones al aborto tras la decisión del Supremo del pasado junio que ya están en vigor, pero muchos de los textos aprobados eran leyes que se habían redactado antes de conocerse el fallo.
La de Indiana es la primera ley redactada y aprobada después de la sentencia.
Varias organizaciones defensoras de los derechos reproductivos de las mujeres, como Planned Parenthood o la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, en inglés), presentaron una demanda contra la ley a finales de agosto.
La primera audiencia del caso se celebrará el lunes 19 de septiembre.
Planned Parenthood denunció este jueves en un comunicado que, si se permite que la ley siga vigente, los ciudadanos de Indiana se quedarán sin acceso a un procedimiento sanitario básico y seguro.
“Es un día devastador para la gente de Indiana”, lamentó la directora general de la organización para la región, Rebecca Gibron.
La entidad denunció además que la ley deja fuera del grupo de organizaciones que pueden proveer servicios médicos en Indiana a las clínicas abortivas, por lo que cualquier persona que necesite un aborto por motivos médicos, o por violación o incesto, deberá ir a un hospital, algo que puede ser mucho más caro y menos accesible para las personas pobres y las minorías.