Los Ángeles (EE.UU.), 31 ago (EFE).- Los Angeles FC (LAFC) de Carlos Vela y Gareth Bale cosecharon este miércoles su tercera derrota consecutiva al perder 2-1 en el campo del Houston Dynamo en un partido en el que estuvieron negados de cara a la portería.
Líder de la Conferencia Oeste y consolidado como el mejor equipo de la MLS esta temporada, el LAFC marchaba con el viento totalmente a favor a mediados de agosto tras reforzarse con fichajes de lujo como Gareth Bale y Giorgio Chiellini y encadenar siete victorias seguidas.
Sin embargo, el equipo angelino perdió ante el San Jose Earthquakes 2-1, cayó de forma rotunda por 4-1 ante el Austin (segundo en el Oeste) y este miércoles extendió su crisis de resultados con una derrota ante un Houston Dynamo que empezó esta jornada como último en el Oeste tras un curso muy decepcionante.
Este nuevo tropiezo complica el camino del LAFC al la MLS Supporters’ Shield, que premia al mejor conjunto de la temporada regular en ambas conferencias.
El LAFC tiene ahora 57 puntos (con 28 partidos jugados) mientras que el Philadelphia Union, el líder del Este, cuenta también con 57 puntos (pero con 29 encuentros disputados) tras hilar tres goleadas espectaculares (0-6 al DC United, 6-0 a los Colorado Rapids y 4-1 al Atlanta United este miércoles).
La falta de puntería fue la clave de esta nueva derrota del LAFC, que tuvo innumerables ocasiones para meter su segundo gol (sobre todo tras el descanso) pero que, al final, de tanto perdonar acabó marchándose de vacío.
En el Houston brilló su portero Steve Clark y no jugó este partido su gran figura, el mexicano Héctor Herrera, que se perdió su segundo partido seguido por lesión.
DUDOSO PENALTI
Con Chiellini como titular y Bale como suplente, el LAFC empezó el partido ya con problemas puesto que en el minuto 13 se adelantó el Houston con un polémico gol de penalti del paraguayo Sebastián Ferreira tras una dudosa mano dentro del área del español Ilie Sánchez.
Seis minutos después, el colombiano Cristian Arango consiguió el empate para el LAFC con un cabezazo al segundo palo a pase de Vela desde la banda derecha.
Arango lleva ya 14 goles en esta temporada.
Kwadwo Opoku tuvo hasta tres ocasiones seguidas para los angelinos.
Primero se encontró con el portero del Houston, luego mandó el balón a las nubes y su tercer intento lo envió al palo y el rechace le cayó a un Arango que tampoco pudo marcar.
En la segunda parte, el argentino Franco Escobar salvó en el 56 un remate picado de Griffin Dorsey que ya se colaba en la portería del LAFC.
Un minuto después, Escobar se retiró lesionado.
Poco después entró Bale en lugar de Vela y tuvo dos ocasiones clarísimas nada más entrar al campo.
La primera, en el 69, fue un remate franco de cabeza en el área pequeña que el portero Steve Clark detuvo con el pecho.
Un minuto después, un disparo cruzado de Bale ya había superado al guardameta y lo salvó tirándose de maravilla Tim Parker cuando el balón ya iba hacia la red local.
El asedio del LAFC continuó: en el 71 Ryan Hollingshead mandó un cabezazo al larguero y el rechace le llegó a Bale, cuyo remate lo sacó Clark con una mano milagrosa.
Parecía que el gol visitante era cuestión de tiempo pero entonces llegó el tanto del Houston por medio de Dorsey, que culminó en el 75 una habilidosa diagonal por la derecha con un fantástico disparo al segundo palo.
El desenlace del partido fue totalmente loco.
En el 88 el ecuatoriano José Cifuentes falló a puerta vacía, el salvadoreño Darwin Cerén dejó al Houston con 10 jugadores con dos tarjetas amarillas ya en el descuento y en el minuto 101 Kellyn Acosta tuvo la última para un LAFC sin fortuna en el remate.