Washington, 31 ago (EFE).- Estados Unidos defendió este miércoles que durante el paso de sus buques por el Estrecho de Taiwán el pasado domingo no se registró ninguna respuesta “insegura” o no profesional por parte de las fuerzas chinas.
“Ese tránsito demuestra el compromiso de Estados Unidos de cara a un Indopacífico libre y abierto y que seguiremos navegando y operando allá donde la ley internacional lo permita. No hubo interacciones inseguras o no profesionales durante ese paso”, dijo en rueda de prensa el general Pat Ryder, secretario de prensa del Pentágono.
Washington está centrado, según añadió, en trabajar con sus aliados y socios en la región para garantizar la estabilidad y preservar el orden basado en la legalidad internacional.
La Marina de EE.UU. ya había precisado que sus barcos, identificados como los cruceros de misiles guiados de la clase Ticonderoga USS Antietam y USS Chancellorsville, realizaron un tránsito “rutinario” en la zona “a través de aguas donde se aplica la libertad de navegación”, en conformidad con el derecho internacional.
Esa operación se produjo tres semanas después de que la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, realizara a principios de mes una fugaz visita a Taipéi pese a las advertencias previas de Pekín, desatando una crisis en el estrecho y provocando unas maniobras militares en los alrededores de la isla.
Taiwán es uno de los mayores motivos de fricción entre China y Estados Unidos, debido sobre todo a que Washington es el principal suministrador de armas de Taiwán y sería su mayor aliado militar en caso de un eventual conflicto bélico con China.
China, por su parte, reclama la soberanía de la isla y considera a Taiwán una provincia rebelde desde que los nacionalistas del Kuomintang se replegaron allí en 1949 tras perder la guerra civil contra los comunistas.