Redacción Deportes (EE.UU.), 28 ago (EFE).- El norirlandés Rory McIlroy ganó este domingo la FedEx Cup y se embolsó el suculento premio de 18 millones de dólares tras culminar una remontada sobre el estadounidense Scottie Scheffler que pudo terminar mal por los errores de ambos en el último hoyo.
Allí les esperaba el surcoreano Sungjae Im, para poner más emoción al desenlace, y es que pudo provocar un desempate al haber cerrado su participación con -20, tarjeta idéntica a la que firmaría finalmente Scheffler. El -21 de McIlroy terminó por darle la victoria final.
Es el tercer título de la FedEx Cup para McIlroy, que superó un déficit de seis golpes respecto a un Scheffler que defendió su posición de líder pero terminó cediendo en los últimos hoyos. Tarjeta de 66 golpes para el norirlandés, mismos números en la ronda final que Sungjae Im.
Ninguno de los dos fue el mejor del domingo, tanto los americanos Tony Finau con 64 y Jordan Spieth con 65, como el noruego Viktor Hovland también con 65 golpes, firmaron las mejores tarjetas del día, aunque todos ellos partían desde demasiado lejos como para acariciar el triunfo definitivo.
Rory McIlroy se mostraba muy satisfecho al recibir el trofeo de campeón: “Qué semana y qué día. Siento mucho lo de Scottie hoy, ha hecho una temporada increíble. Es un gran golfista y mejor persona. Al menos ya ganó una en Georgia con el Másters”.
Tampoco dejó pasar la oportunidad el golfista norirlandés, de reivindicar al PGA Tour respecto a LIV Golf: “Este triunfo significa mucho, creo en este circuito y en sus jugadores. Somos los mejores jugadores del mundo jugando al golf. Es un momento increíble de orgullo para mí, pero también para la PGA. Los mejores jugadores del mundo jugando unos contra otros”.
El duelo entre Scheffler y McIlroy fue muy emocionante porque además del cara a cara directo por el triunfo final, ninguno podía olvidar que había otro candidato, un Im muy preciso que jugaba un hoyo más adelante y provocaba las ovaciones de los aficionados que podían escucharse en la distancia, muy temprano se sumó a la lista de favoritos.
Uno de los momentos clave fue en el hoyo 12, cuando el ‘birdie’ de McIlroy le situaba colíder junto a Scheffler con -21 en el global. El norteamericano cerraba el 16 con ‘bogey’ y cedía la punta en solitario a favor del norirlandés.
Ambos jugadores notaron la presión y en los dos últimos hoyos se complicaron muchísimo con bolas al público, a los bunkers y contra las estructuras de la grada. Pero lograron salvar al menos el par del campo gracias a ‘approachs’ y ‘putts’ que demostraban su calidad.
Fue un día especialmente bueno en el green para McIlroy, hasta en cuatro ocasiones culminó con el putt a más de diez pies de distancia. Uno de ellos, en el 16, provocaba que Scheffler perdiera por primera vez en toda la semana su liderato.
Rory McIlroy acumula un total de 28 millones de dólares en premios del circuito en la presente temporada y hace historia al convertirse en el primer golfista que suma tres victorias en la FedEx Cup, dejando atrás a una leyenda como Tiger Woods. Es el número dos mundial y cierra con tres títulos el curso, habiendo ganado previamente CJ Cup y Abierto de Canadá.
Jon Rahm perdió sus opciones en la mañana a la hora de cerrar su tercera jornada, con dos ‘bogeys’ en el 14 y el 17 quedaba ya muy lejos de la cabeza. Ya en su cuarta ronda acumuló de nuevo cuatro ‘bogeys’ y sin la presión jugó más suelto, culminando con dos birdies en el 15 y el 18, cerrando al menos con mejor sabor de boca.
El de Barrika terminó decimoquinto a 10 golpes de McIlroy, lejos de lo que se podía esperar y por detrás del otro representante de habla hispana, el chileno Joaquín Niemann, que cerró la última jornada con una tarjeta de 69 golpes como undécimo clasificado del torneo.