Washington, 1 ago (EFE).- La Corporación de Radiodifusión Pública de Estados Unidos (CPB) anunció este viernes el inicio de un cierre gradual de sus operaciones, como consecuencia de los recortes presupuestarios implementados por la Administración de Donald Trump, que por primera vez en casi seis décadas ha eliminado la financiación destinada a este organismo.
La CPB, que financia de manera directa o indirecta a la radio pública NPR y la televisión pública PBS, subrayó en un comunicado que durante casi 60 años ha cumplido su misión ante el Congreso de “construir y mantener un sistema de medios públicos confiable que informe, eduque y sirva a las comunidades de todo el país”.
“A pesar de los extraordinarios esfuerzos de millones de estadounidenses que llamaron, escribieron y solicitaron al Congreso que preservara la financiación federal para la CPB, nos enfrentamos a la difícil realidad de cerrar nuestras operaciones”, dijo en la nota su presidenta y directora ejecutiva, Patricia Harrison.
El grupo informó este viernes a sus empleados de que la mayoría de sus puestos serán eliminados al cierre del año fiscal, este próximo 30 de septiembre.
Un pequeño equipo de transición permanecerá hasta enero del año que viene para garantizar un cierre “responsable y ordenado” de las operaciones.
“Los medios públicos han sido una de las instituciones más confiables en la vida estadounidense, brindando oportunidades educativas, alertas de emergencia, diálogo cívico y conexión cultural a cada rincón del país”, recordó Harrison.
La CPB es una corporación sin ánimo de lucro autorizada por el Congreso en 1967 y que se encarga de administrar la inversión del Gobierno federal en la radiodifusión pública.
Hasta ahora ayudaba a respaldar las operaciones de más de 1.500 cadenas de radio y televisión públicas administradas y operadas localmente en todo el país. Además, era la mayor fuente individual de financiación para la investigación, la tecnología y el desarrollo de programas para la radio, la televisión y servicios en línea relacionados.
Su presidenta había señalado en un comunicado anterior que los medios que notarán un impacto mayor por la falta de financiación e incluso podrían verse obligados a cerrar en algunos casos son las cadenas que están en localidades con poca población, zonas rurales y comunidades indígenas.
La retirada de fondos sufrida se incluye en un paquete de recortes de unos 9.000 millones de dólares a la ayuda exterior y la comunicación pública promovido por la Administración de Trump y aprobado en la madrugada del 18 de julio por la Cámara de Representantes, de mayoría republicana.
Trump ha criticado públicamente a medios como NPR o PBS a los que acusa de tener un sesgo izquierdista.