Toronto (Canadá), 1 ago (EFE).- El español Alejandro Davidovich reconoció que saltó este viernes a la pista del torneo ATP 1000 de Toronto más motivado tras protestar por la decisión de programar su partido contra el checo Jakub Mensik, a quien ganó en dos sets, a primera hora del día cuando el resto de los partidos se iniciaban 90 minutos después.

A preguntas de EFE tras derrotar a Mensik en 77 minutos por 6-2 y 6-4, el jugador malagueño dijo que la polémica por su protesta en las redes sociales ha tenido un impacto positivo en su juego.

“Bueno, obviamente al poner ese tuit no, al final he leído muchos comentarios y al final de una manera sí que me ha motivado porque algunas personas se la han tomado bien, otras mal. Y al final, algún jugador que otro ha comentado. No quiero ni comentar sobre eso”, explicó con una sonrisa.
“Yo por mi parte me he levantado 6.50 (de la mañana). No tengo ningún problema. Me he levantado muchas veces a esa hora también para entrenar y la verdad que estaba igual que si jugara a las tres de la tarde”, continuó.
Davidovich también dijo que no estaba enfadado por jugar a las 11.00 de la mañana del viernes pero que había querido hacer un “llamamiento” al resto de jugadores.
“Creo que hay muchos jugadores que nos estamos quejando. Pero al final a mí no me importa jugar a las 11.00 o a las dos de la mañana. El caso es que si todos los partidos empezaban a las 12:30 creo que lo más justo es que todos empecemos a la misma hora, al igual que las chicas en Montreal que empiezan todas a las 12:30”, razonó.
Sobre su victoria ante Mensik, el español señaló que “sabía que tenía que estar sólido”.
“Me estoy encontrando en una forma en la que empiezo a fallar menos y menos. Sé que Mensik es un jugador muy agresivo, que saca muy bien, con mucha agresividad y más aquí que las pistas son rápidas. Así que sabía que tenía que pasar de defensa a intentar a atacarle y moverlo”, concluyó.
Tras su victoria este viernes, Davidovich se enfrentará en los octavos al ganador del partido que disputan este viernes el ruso Andrey Rublev y el italiano Lorenzo Sonego.