Cincinnati (EE.UU.), 17 ago (EFE).- El español Carlos Alcaraz trabajó una hora este miércoles en la pista 5 del Lindner Family Tennis Center de Cincinnati, repleta de aficionados, ejercitándose con atención al duelo de octavos de final que disputará este jueves contra el croata Marin Cilic.
Después de su brillante debut del martes, en el que arrolló 6-3 y 6-2 al estadounidense Mackenzie McDonald, Alcaraz saltó a entrenar a las 12 locales en una pista secundaria del club de Cincinnati, donde ya le esperaban más de cien aficionados.
Guiado por su entrenador Juan Carlos Ferrero, el número 4 del ránking mundial, ganador de dos Masters 1.000 este año, en Miami y en Madrid, trabajó mucho una de las claves de su partido con Cilic, su capacidad de responder a los potentes saques del croata.
Alcaraz también entrenó la protección de la red y completó su entrenamiento ensayando el saque.
El murciano, de 19 años, arrancó este torneo de la mejor forma después de que el estadounidense Tommy Paul le eliminara en su estreno en Montreal.
Al acabar el entrenamiento, Alcaraz se quedó más de diez minutos firmando autógrafos y concediendo fotos y también regaló su raqueta a un niño.