HomeDeportesHonores para Di María

Honores para Di María

Date:

Historias Relacionadas

Estevao, la perla brasileña con presente en el Palmeiras y futuro en el Chelsea

Redacción Deportes (EE.UU.), 28 jun (EFE).- El Mundial de...

Moisés Caicedo, el mejor jugador del ‘eterno’ Benfica-Chelsea pero suspendido para cuartos

Redacción Deportes (EE.UU.), 28 jun (EFE).- El ecuatoriano Moisés...

Enzo Maresca carga contra las suspensiones de partidos: “Esto no es fútbol, es un chiste”

Redacción Deportes (EE.UU.), 28 jun (EFE).- Enzo Maresca, entrenador...

1-4. Nkunku rescata al Chelsea del partido más largo del mundo

Redacción deportes, 28 jun (EFE).- Chirstopher Nkunku, suplente de...

Mascherano: “No podemos salir a tirar el partido”

Washington, 28 jun (EFE).- Federico Redondo, mediocampista del Inter...

Redacción deportes, 28 jun (EFE).- La eliminación del mundial de clubes ante el Chelsea del Benfica terminó por ser el último servicio oficial del argentino Ángel Di María en el fútbol europeo, antes de emprender el viaje de vuelta a su país para formar parte de la plantilla de Rosario Central, su club de origen, el lugar donde empezó todo.

El argentino Ángel Di María (c), del Benfica, elude la marca de Moisés Caicedo (i) y de Christopher Nkunku, del Chelsea. EFE/EPA/BRIAN WESTERHOLT

Porque ‘el Fideo’ se marcha tal y como llegó. Sin reserva alguna en su esfuerzo y con un gran rendimiento. Pero con un historial plagado de éxitos y también de reconocimiento. Allí por donde estuvo, y fueron unos cuantos lugares, dejó su huella. Europa le echará de menos.

Ángel Di María, que en febrero cumplió 37 años, decidió afrontar el final de su carrera en Lisboa, donde inició su periplo fuera del país, donde explotó como jugador y se convirtió durante mucho tiempo en uno de los mejores, en un futbolista cotizado.

Vivió lo que le faltaba por vivir en sus años de experiencia. Un partido eterno, interminable, suspendido provisionalmente durante dos horas por amenaza de tormenta. Para jugar cinco minutos y una prórroga en la que se reivindicó. Marcó el argentino, de penalti, y rescató a su equipo que se hundió en los restantes treinta minutos, con un jugador menos.

Aún así, con el sentimiento del adiós, el argentino tiró de su equipo y en más de una oportunidad amenazó con marcar, a la contra. No llegó el gol. Ni el milagro. El Benfica perdió y dijo adiós.

Han pasado dos décadas desde que salió de Rosario, a donde regresa ahora, con la tranquilidad del deber cumplido en cada ciudad que hizo suya durante cualquier tiempo. Respetado y admirado, ‘el Fideo’ ha sobresalido entre las mejores plantillas del Viejo Continente. Dejó Lisboa reclamado por el Real Madrid de Jose Mourinho y después se marchó al Manchester United, al París Saint Germain y al Juventus. Ha formado parte de las cinco grandes Ligas.

Di María, con cuatro goles a sus espaldas, máximo anotador provisional de la competición, emprende su marcha junto al Benfica, apeado del Mundial de Clubes donde tuvo un estupendo rendimiento, con un meritorio e histórico triunfo ante el Bayern Múnich que consolidó a las Águilas como equipo revelación del evento.

Fue estimulante para el argentino el tramo final en Lisboa después de una temporada donde casi todo le salió mal, donde los títulos se escaparon a última hora. En la última jornada la Liga y también después en la final de la Copa.

Nada que ver la apariencia frágil de su físico con la presencia en el campo, con la huella que dejó en cada partido, en cada carrera, en cada regate, en cada disparo. Con 16 años debutó en la máxima competición del fútbol argentino y ya no se bajó de la condición de futbolista. Con un futuro prometedor fue reclutado por el Benfica, su primer club europeo, el que le convenció para dar el salto y hacerse conocer. Tres temporadas en Lisboa y un paso más, hacia el Real Madrid, en el 2010, donde estuvo un lustro y donde conquistó su única Liga de Campeones.

Se marcó cinco temporadas después y tuvo un paso efímero por la Premier y por el Manchester United, donde no tuvo continuidad. Fue el club de Old Trafford un puente hacia París, donde se estableció, donde se asentó. Siete campañas y un sinfín de trofeos y de emociones.

Hace tres años dejó el PSG. Cumplió su ciclo. Inició su final. Fue al Juventus, a Turín, y después de una temporada afrontó el último capítulo europeo, con el Benfica, donde ha permanecido dos años antes de regresar a Rosario.

Treinta títulos con sus equipos. Cinco con el Benfica (Una liga, una Supercopa y tres Copas) y seis con el Real Madrid, entre ellos la Champions además de una Liga y una Copa, y diecinueve con el París Saint Germain: cinco de ellos la Ligue 1.

Erigido en una referencia de Argentina fue un fijo en la selección. El zurdo rosarino formó parte de la sub-20 albiceleste en el 2007, en el sudamericano, donde logró la clasificación para el mundial de la categoría y los Juegos Olímpicos de Pekín. Ganó ambos después.

En la absoluta fue un fijo aunque le costó asentarse. Compartió gloria con Leo Messi. Debutó en el 2008, con Alfio Basile como seleccionador. Llegó a jugar 145 partidos con el equipo nacional y firmó 31 goles. Cuatro Campeonatos del Mundo, con el título en la mano en el más reciente, el de Qatar 2022 después del intento fallido en Brasil 2014, donde disputó la final. Además, dos Copas América y una finalísima, en el 2022, en Londres.

‘El Fideo’ inicia ahora el camino de regreso. Casi dos décadas fuera del país. Y ninguna cuenta pendiente. El Mundial de Clubes fue un estupendo tramo final para el argentino que siempre se dejó notar y que deja tras de sí un incuestionable rendimiento. “Me duele terminar así pero estoy orgulloso de haber vuelto”, dijo cuando regresó al Benfica.

Subscribe

- Never miss a story with notifications

- Gain full access to our premium content

- Browse free from up to 5 devices at once

Latest stories