Washington, 21 may (EFE).- El presidente de EE.UU., Donald Trump, cena mañana jueves con 220 inversores, entre ellos un polémico empresario de origen chino investigado por fraude, que desembolsaron miles de dólares para adquirir su criptodivisa $Trump y participar así en esta cita que está siendo criticada ante el creciente número de negocios del mandatario relacionados con activos digitales.
La cena de gala también ha puesto de relieve la voluntad de Trump por exponerse a figuras con intereses opacos en eventos de este tipo.
En abril las dos empresas del conglomerado empresarial del presidente que controlan el 80 % de $Trump en circulación anunciaron que los 220 inversores que a fecha del 12 de mayo ostentaran los mejores coeficientes en sus carteras de esta memecoin serían premiados con “la invitación más exclusiva del mundo”.
La invitación, que han logrado quienes invirtieron al menos 54.000 dólares en $Trump, da acceso a una cena de gala que se celebrará en el club de golf que Trump posee a las afueras de Washington y en la que el mandatario hablará “sobre el futuro de las criptomonedas”.
Además, los inversores con los 25 mejores coeficientes recibirán un “tour especial” por la Casa Blanca y participarán en una “recepción exclusiva” con el líder republicano.
En línea con las sospechas de varios medios, el primer clasificado de entre los 220 inversores -todos ocultos con seudónimo- premiados, ha resultado ser Justin Sun, excéntrico empresario de 34 años nacido en China que ostenta actualmente un pasaporte de la nación caribeña de San Cristóbal y Nieves.
El propio Sun, que ha gastado unos 16 millones de dólares en $Trump para asistir a los eventos que preside mañana el mandatario, confirmó en X que es el “mayor tenedor” de su memecoin y dijo que se siente “honrado y agradecido” por participar en la cena con Trump, del que se declara su “fan número uno”.
Considerado una suerte de protegido del magnate chino Jack Ma, Sun, que tiene una larga trayectoria en el mundo de las criptodivisas, se encuentra negociando con la Comisión de Bolsa y Valores (SEC por sus siglas en inglés) estadounidense la resolución de una demanda que el organismo presentó contra él en 2023 por supuesto fraude.
A su vez, el año pasado Sun, que se ha impuesto también en otras “subastas” para cenar con Warren Buffett o para hacer turismo espacial con la compañía de Jeff Bezos, invirtió 75 millones en World Liberty Financial, compañía de divisas digitales ligadas al grupo Trump.
La presencia de Sun y el hecho de que se desconozca por el momento la identidad de los otros 219 que acuden al evento ha desatado críticas desde diversos frentes que acusan al neoyorquino de montar una trama en la que, a cambio de inversiones, se concede acceso directo al presidente a figuras extranjeras con intereses que el público desconoce.
Distintos análisis apuntan a que la gran mayoría de los principales inversores de $Trump no son ciudadanos estadounidenses.
El Partido Demócrata ha condenado la celebración del evento y el que Trump esté promocionado divisas electrónicas y usando su cargo para incrementar el valor de estos activos.
Ha presentado además una propuesta de ley -que tiene pocas posibilidades de prosperar- en el Senado para impedir que funcionarios electos o figuras ligadas al Gabinete estadounidense respalden o emitan criptomonedas.
A su vez, la ONG fundada por el senador progresista Bernie Sanders, Our Revolution, ha convocado una manifestación ante el campo de golf donde se celebrará la cena para protestar por las audiencias que Trump está concediendo a cambio de dinero y por el hecho de que, según la entidad, Trump “se perfila como uno de los tenedores de criptomonedas más ricos del mundo” como resultado de sus recientes operaciones en este terreno.