Washington, 9 may (EFE).- La Administración del presidente estadounidense, Donald Trump, ha despedido a la directora de la Biblioteca del Congreso, Carla D. Hayden, la primera mujer y la primera persona de raza negra en ocupar el liderazgo de la institución, que asumió en 2016.
Hayden, de 72 años, fue designada por el exmandatario demócrata Barack Obama (2009-2017) y se mantuvo en el puesto durante el primer mandato de Trump (2017-2021).
La prestigiosa Biblioteca del Congreso, la institución cultural gubernamental más antigua de Estados Unidos y una de las bibliotecas más grandes del mundo, solo ha tenido 14 directores en sus 225 años de historia. Hayden sustituyó a James H. Billington, designado en 1987 por el expresidente Ronald Reagan.
La comunicación del despido, hecho efectivo el jueves y confirmado por el portavoz de la Biblioteca, llegó de la Oficina de Personal de la Casa Blanca.
La portavoz presidencial, Karoline Leavitt, afirmó este viernes que la decisión se debió a “cosas bastante preocupantes que había hecho en la Biblioteca del Congreso en pos de las DEI”, siglas con las que se identifica en inglés a las políticas de diversidad, equidad e inclusión.
“No creemos que estuviera sirviendo adecuadamente a los intereses del contribuyente estadounidense”, agregó Leavitt, quien acusó a Hayden, sin ofrecer pruebas, de “colocar libros inapropiados para niños” en la Biblioteca.
“Por lo tanto, ha sido destituida y el presidente está en todo su derecho de hacerlo”, indicó.
Hayden es una directora “competente, íntegra y distinguida”, dijo en un comunicado el líder de la minoría demócrata en la Cámara Baja del Congreso, Hakeem Jeffries, quien criticó la decisión del Gobierno republicano.
“La injusta decisión de Donald Trump de despedir a la doctora Hayden mediante un correo electrónico”, opina Jeffries, “es una vergüenza” y supone una nueva acción “en su insistente esfuerzo por prohibir libros, encubrir la historia estadounidense y dar marcha atrás en el tiempo”.
Desde su regreso al poder en enero, Trump ha dirigido la mira hacia las instituciones culturales que reciben fondos del Ejecutivo.
En febrero su Administración despidió a Deborah F. Rutter, la directora del Centro Kennedy, una de las instituciones culturales más emblemáticas del país. En su lugar, Trump asumió el cargo de presidente de la Junta Directiva y sustituyó a sus miembros por un grupo de sus aliados.
En abril destituyó a los miembros del patronato del Museo del Holocausto de Estados Unidos nombrados por el anterior Gobierno de Joe Biden (2021-2025), entre ellos Doug Emhoff, esposo de la exvicepresidenta Kamala Harris.
Durante sus primeros 100 días, Trump también firmó una orden ejecutiva para eliminar lo que denominó “ideología estadounidense” del Instituto Smithsonian, responsable de la gestión de los principales museos de la capital, ha amenazado con cortar fondos a varias universidades del país y también ha declarado la guerra a las políticas DEI.