Washington, 4 ago (EFE).- La inteligencia de EE.UU. cree que Rusia está inventándose pruebas para atribuir a Kiev el ataque perpetrado la semana pasada contra una cárcel en la autoproclamada República Popular de Donetsk, en el que murieron medio centenar de prisioneros ucranianos.
Según dijo a Efe un funcionario estadounidense, la inteligencia del país ha determinado que Rusia esta “falsificando pruebas” para atribuir a Ucrania el ataque de la cárcel, ubicada en la localidad de Yelenovka (también conocida como Olenivka, en ucraniano).
Estados Unidos, incluso, tiene “motivos” para creer que Rusia iría tan lejos como para presentar el escenario de una forma que parezca que los misiles Himars, suministrados por Washington a las fuerzas Armadas ucranianas, son los culpables del ataque a la prisión.
Según la citada fuente, Moscú tiene previsto terminar todos esos preparativos antes de que puedan acceder al lugar de los hechos periodistas o investigadores.
Estados Unidos ha hecho públicas esas acusaciones contra Rusia después de que ayer miércoles la ONU anunciara una misión especial para investigar el ataque contra la cárcel.
Ese ataque ha sido objeto de acusaciones cruzadas: Moscú acusa a Kiev y Washington al asegurar que el ataque fue perpetrado con misiles Himars, mientras que Kiev niega rotundamente estar detrás del bombardeo que acabó con la vida de sus propios hombres y apunta a mercenarios de la compañía militar privada rusa Wagner.
Moscú ha confirmado la muerte de 50 de los 193 prisioneros ucranianos que se encontraban en la penitenciaría, entre los que figurarían miembros del batallón Azov, considerados “nazis” por las autoridades rusas y héroes por los ucranianos por su resistencia a Moscú en la acería de la ciudad de Mariúpol.