Redacción Deportes, 18 dic (EFE).- Tras perder Barranquilla, por incumplimiento económico, la sede de los Juegos Panamericanos de 2027, la organización Panam Sports extiende, 350 días después, una suerte de ‘borrón y cuenta nueva’ a Colombia, en caso de que alguna de sus ciudades quiera presentar su candidatura para la edición de 2031.
La decisión, adoptada el 3 de enero pasado, hace exactamente 11 meses y 15 días, “obedeció a una problemática contractual de incumplimiento sostenido del contrato que estaba firmado.
Pero eso es algo que pasó”, dijo en entrevista con EFE el ingeniero chileno Neven Ilic, presidente de Panam Sports.
“Colombia puede ser un candidato para hacer los Juegos Panamericanos cuando quiera”, afirmó Ilic, desterrando cualquier presunción de que el país cafetero deba pasar algún periodo de ostracismo.
En agosto de 2021, cuando el mundo superaba los estragos de la pandemia de la covid-19, Ilic, a nombre de la organización deportiva que aglutina a 41 países, proclamó a la ciudad caribeña de Barranquilla como sede de la XX edición de los Juegos Panamericanos.
“Esos juegos los entregamos sin competencia. Como una asignación y premio a lo que significa el deporte de Colombia para nosotros”, destacó el directivo, quien el 3 de noviembre fue reelegido para su tercer y último mandato en la presidencia, hasta 2028.
“Colombia ya había postulado dos veces: perdió con Toronto para los Juegos de 2015 y con Lima con miras a 2019. Entonces dijimos: Colombia es importante, y ante su nueva propuesta convencimos a las autoridades y a los votantes de que se lo merecía”, recordó.
Ascenso, caída y nuevo panorama
La alegría de ese 27 de agosto de hace tres años dio un giro insospechado hacia la preocupación por el incumplimiento sostenido del contrato firmado.
Panam Sports dio a las autoridades del país 90 días para el pago de 8 millones de dólares pendientes. El primer desembolso de 4 millones se acordó para el 30 de diciembre de 2023 y el segundo, antes del 30 de enero de 2024.
Sin embargo, la ministra del Deporte de Colombia, Astrid Rodríguez, no cumplió con el pago, y Panam Sports optó por retirar la sede el 3 de enero y buscar un organizador sustituto.
Sesenta y nueve días después, el 12 de marzo, la Asamblea General Extraordinaria concedió en Miami la sede a Lima, la capital peruana, que en 2019 acogió la XVIII edición del certamen.
“Si bien para los colombianos fue una pena, para nosotros también lo fue. Pero mi mensaje es que Colombia, si lo quiere volver a intentar, que lo vuelva a intentar. Tendrá la mejor voluntad de los votantes, la mía y la del Comité Ejecutivo”, declaró.
“Los colombianos son protagonistas relevantes, un ejemplo para muchos de nuestros países en cómo han llevado la política deportiva adelante. Así que, bueno, pasó lo que pasó, pero eso no significa que Colombia no pueda seguir soñando con hacer los Juegos Panamericanos”, puntualizó Ilic.
Comienza la carrera por la sede de 2031
Colombia acogió una vez los Juegos Panamericanos, en Cali, en 1971.
El pulso por la sede de la XXI edición comenzó el pasado 3 de diciembre, cuando las autoridades municipales de Río de Janeiro y de la adyacente ciudad de Niterói presentaron una carta de compromiso al Comité Olímpico Brasileño (COB).
Río, la 'Cidade Maravilhosa', acogió los Panamericanos en 2007.
El interés en Brasil también ha sido expresado desde la metrópoli más grande y poblada, São Paulo, que fue anfitriona de los Juegos en 1963. Sin embargo, las reglas del juego establecen que solo puede haber una candidatura por país.
Panam Sports ha establecido el 31 de enero próximo como el “Día D” para cerrar la recepción de propuestas.
En la carrera también se espera la oferta de Asunción, la capital paraguaya, que se postuló para tomar el testigo que no pudo sostener Barranquilla, así como la de San Salvador, que promovió con éxito los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 2023.
En ese certamen, Santo Domingo, la capital de República Dominicana, ejerció como subsede y en 2026 tomará el rol principal, por lo que sus autoridades consideran que la experiencia adquirida y el legado de las instalaciones preparadas también le dan estatura para presentar su candidatura a los Panamericanos.
Desde Bolivia, las autoridades de Cochabamba evalúan retomar el impulso que las llevó a presentar credenciales para quedarse con el certamen de 2027. La satisfacción por el éxito en la organización de los Juegos Sudamericanos de 2018 sigue vigente.
Por Juan Carlos Ochoa