Toronto (Canadá), 16 dic (EFE).- El déficit presupuestario de Canadá para el año fiscal 2024 aumentará a 61.900 millones de dólares canadienses (43.448 millones de dólares estadounidenses o 41.352 millones de euros), señaló este lunes el Gobierno canadiense.
La cifra es parte de la declaración económica de otoño que el Gobierno canadiense entregó este lunes en el Parlamento y que contiene también un gasto de 1.300 millones de dólares para reforzar la frontera, una de las demandas del presidente electo de EE.UU., Donald Trump.
La declaración económica de otoño tenía que haber sido presentada por la titular del Ministerio de Finanzas.
Pero en una decisión inesperada que ha sumido al Gobierno canadiense en caos, la viceprimera ministra y ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, presentó su dimisión a primeras horas del lunes por “diferencias políticas” con el primer ministro, Justin Trudeau.
En su carta de dimisión, Freeland criticó algunas decisiones económicas del Gobierno, que calificó de “pantomimas políticas” y señaló que Canadá debería concentrarse en confrontar la amenaza del 25 % de aranceles que Trump quiere imponer cuando llegue al poder el 20 de enero de 2025.
Canadá ha dicho que los aranceles de Trump provocarán una grave crisis económica en el país que destruirá miles de puestos de trabajo.
En la primavera, Freeland se había comprometido a mantener el déficit presupuestario en un máximo de 40.000 millones de dólares canadienses.
El Gobierno canadiense explicó que el aumento del déficit es consecuencia del pago de una compensación de 16.400 millones de dólares canadienses a las comunidades indígenas del país y un cargo de 4.700 millones de dólares canadienses relacionado con la covid-19.
La declaración económica de otoño contiene la decisión, anunciada en noviembre, de suspender durante dos meses la aplicación del impuesto al valor añadido (IVA) a productos como alimentos, juguetes, calzados, periódicos y bebidas, parte de un paquete de medidas para aliviar la presión financiera de los consumidores.
Pero el documento no contiene otra de las medidas inicialmente señalada por el Gobierno canadiense: un cheque de 250 dólares canadienses para todas las personas que cotizaron en 2023.
En su carta de renuncia, Freeland también señaló que Trudeau quería sustituirla al frente de Finanzas, puesto que ocupaba de 2020.