Miami, 29 jul (EFE).- La junta municipal de Miami aprobó avanzar en un plan para crear una comunidad de pequeñas viviendas para desamparados, algo que inmediatamente desató la polémica y acusaciones de intentar construir “un campo de concentración”.
Los comisionados (concejales) rechazaron el plan en una primera votación realizada el jueves, pero uno de ellos, Alex Díaz de la Portilla, cambió de parecer y el tema fue aprobado en una segunda por tres votos a favor y dos en contra, según informaron este viernes medios locales.
La idea es construir entre 50 y 100 pequeñas viviendas para desamparados probablemente en Virgina Key, una isla en la bahía de Vizcaya unida al continente por un puente que lleva a otra isla, Key Biscayne, uno de los lugares residenciales más selectos de Miami.
Virgina Key es usada para actividades deportivas y recreativas y también existe allí una planta de tratamiento de agua.
El objetivo del plan es evitar que haya gente viviendo en las calles en tiendas de campaña y otros habitáculos.
Miami vive una emergencia en materia de vivienda asequible por los altos precios que trajo la mudanza de numerosas personas de otros estados durante la pandemia de la covid-19.
Entre los que protestaron públicamente por el plan hubo desamparados y también representantes de organizaciones que los ayudan en Miami con refugios y comida y servicios de salud.
“Eso es un campo de concentración. Somos seres humanos no animales”, dijo una mujer que se identificó como desamparada durante la asamblea en la que se trató el asunto.
La iniciativa de crear lo que oficialmente se conoce como una “zona de transformación y transición” partió del concejal Joe Carollo, quien indicó que como “nadie quiere” que la comunidad se instale en su vecindario se escogió “por defecto” Virgina Key.
Entre las razones aducidas contra el plan está que Virgina Key es una zona de protección medioambiental, pero la mayoría de los críticos se refirieron a que no ataca de raíz el problema de las personas sin hogar.
Para el mes de septiembre se convocó otra reunión para avanzar en el plan y definir el emplazamiento de la comunidad.
De acuerdo con fuentes especializadas, en un día cualquiera hay entre 3.000 y 4.000 personas sin hogar en el condado de Miami-Dade.