Patricia Ortiz | [email protected]
Charlotte, NC.- Lo que había sido para la familia Bohorquez Barbosa una vida tranquila y feliz en Charlotte, luego de huir en 2022 de la violencia e inseguridad de su natal Colombia, el último fin de semana de julio terminó en tragedia y desolación tras la muerte de Jeimy Alexander Bohórquez Reyes.
De 47 años, el esposo y padre de dos niños de 8 y 10 años, fue encontrado muerto en la madrugada del domingo 28 de julio al lado de una vía en Lenoir, una localidad al este de Carolina del Norte, con el rostro desfigurado y tres tiros en la cabeza, de acuerdo con lo narrado a Enlace Latino NC, por su esposa Sandra Barbosa.
“Él estaba muy feliz en Charlotte. No entiendo por qué tuvo que padecer una muerte tan horrible y brutal, por qué cegaron su vida así. Pido a las autoridades que hagan lo que tengan que hacer, pero que haya justicia”, manifestó la esposa.
CONTRATADO
Jeimy Alexander Bohórquez Reyes se desempeñaba como conductor independiente de medio tiempo, y hacía viajes locales a personas conocidas. El colombiano conducía un Jeep Cherokee.
En la noche del sábado 27 de julio fue contactado por una mujer a la que le había realizado solo un viaje anteriormente.
“La mujer lo contactó como a las 10:30 p.m. para que le hiciera un viaje para tres personas para llevarlas a dos horas de Charlotte”, contó la viuda.
De acuerdo con Sandra, usualmente cuando eran viajes más largos ella o su hermano acompañaban a su esposo, pero al hacerle saber que iría acompañado la mujer no respondió.
“Mi esposo al ver que ella no respondía le dijo que enviaría a otra persona, pero le dijo que solo confiaba en él, y al final resultó diciendo que eran cuatro adultos y dos niños, es decir yo no podía ir, así que se fue solo”, contó.
TEMOR
Para Sandra era una noche normal, y como de costumbre su esposo le enviaba su ubicación en tiempo real, y mantenían comunicación por mensaje de texto y llamadas.
“La última vez que hablé con él fue como a las 11:40 p.m. que me llamó para que mirara un vuelo para Maryland para los dos. Más tarde el último mensaje de su ubicación que vi fue a las 12:21 a.m.”, explicó Sandra.
A eso de las 3 a.m. Sandra despertó y al no ver a su esposo le envió un mensaje, pero no le respondió.
La última ubicación que aparecía de su esposo fue a la 1:49 a.m., así que se preocupó y decidió llamar a su cuñada.
“Mi cuñada me dijo que fuéramos al lugar donde aparecía la última ubicación, y que llamara a la policía, porque nos parecía todo muy raro, ya que él nunca estuvo tanto tiempo sin comunicarse”, señaló Sandra.
AUTORIDADES
Yendo de camino con sus cuñados y dos familiares, hizo la llamada al 911 y le dijo a la operadora que iban al lugar donde aparecía el celular, pero ésta le indicó que debía regresar al punto desde donde había realizado la llamada.
Sandra regresó a su casa, y sus familiares continuaron el camino hacia el lugar donde aparecía el celular.
Entretanto, la operadora le pidió a Sandra toda la información de su esposo y las razones para hacer la denuncia de su desaparición.
Ella dice, que hora y media después llegó una patrulla a su casa, y casi al mismo tiempo sus cuñados llegaron al lugar donde aparecía el celular, cerca de una gasolinera.
RASTREAN VEHÍCULO
“La policía me preguntó por él, pidió una foto, datos del vehículo, y entonces miró por el radar de su computador donde estaba verificando la cuando la placa y me dice: señora, es que este carro está a cuatro millas de acá. Y dije: cómo así si su celular me está mostrando que está a hora y media de acá. Y me dijo: no sé, pero este vehículo se está moviendo acá en Charlotte”, narró Sandra.
Mientras tanto el agente mediante el radar podía ver que el vehículo de Jeimy se movía a la altura de Shamrock Road, y luego a la altura de Central Avenue con Eastway Drive, muy cerca de su casa.
“Cuando veía que el carro seguía moviéndose le dije al policía, ¡por favor, paré ese carro! Entonces fue cuando me llamó mi cuñada y me dijo que había encontrado el celular nada más. Y cerca había una cabaña y se metió en el terreno para buscar, pero como era propiedad ajena le comenzaron a disparar, y el policía dijo que se saliera de ahí”, continúo narrando Sandra.
Según Sandra, sus cuñados se dirigieron a buscar una estación policial en Lenoir, la población donde llegaron, en el condado Caldwell, al oeste del estado.
“Mientras tanto, el policía me decía que no me preocupara que él estaba cerca y que seguro se había tenido que demorar, pero le dije que yo conocía a mi esposo y que si no se comunicaba era muy extraño, y que seguro no era él quien manejaba el carro. Y me dijo que no podían hacer nada porque él era dueño del carro y no podía irlo a parar sin razón”, sigue contando la viuda.
Finalmente, el policía se tuvo que ir, pese a que Sandra le dijo que autorizaba que pararan el vehículo porque ella aseguraba que su esposo iba en él.
LOCALIZAN CADÁVER
El domingo, pasado el mediodía, llegaron a la casa de Sandra dos alguaciles que hablaban español, para informarle que su esposo había sido encontrado muerto a las 2 a.m. y que estaba en la morgue.
“Quedé en shock y parece que a mis cuñados les dieron la noticia al mismo tiempo”, dijo Sandra.
Según un reporte de la Oficina del Alguacil del Condado Caldwell, Jeimy fue encontrado sin vida en la cuadra 2742 Blowing Rock Blvd, Lenoir, a 30 minutos del supuesto lugar de destino.
INTENTO DE EXTORSIÓN
Sin embargo, luego de una publicación en las redes sociales sobre la desaparición de Jeimy, donde habían puesto el teléfono de su cuñada, los empezaron a extorsionar pidiendo un rescate de $10,000, por lo que llegó a pensar que estaba secuestrado, porque, sumado a esto, recibió un mensaje del banco de que sus fondos estaban bajos.
Sandra afirma, que no puede entender por qué su esposo tuvo un final tan violento, ya que era una persona trabajadora, a quien muchos estimaban.
“Todos siempre dicen que todas las personas siempre son buenas después que mueren, pero ese no es el caso de Jeimy, él realmente era una buena persona, no tenía nada que ver con nadie, y creo que por eso como 100 personas que lo conocían fueron a Lenoir para ver qué había pasado”, mencionó.
IDENTIFICAN CUERPO
La esposa dijo, que como el celular estaba en manos de las autoridades en Lenoir, pudieron ver los últimos audios, mensajes y números de teléfonos de llamadas realizadas y recibidas, así como las ubicaciones a donde se había trasladado.
“Con todo esto no me podía quedar así, yo no podía entender cómo las autoridades no habían detenido el carro si seguía moviéndose el domingo en Charlotte, y además quería estar segura de que el cadáver que encontraron era el de mi esposo”, dijo.
Sandra y sus cuñados lograron llegar a Lenoir el domingo en la tarde, y allí pudieron hablar con la detective encargada del caso, a quien le solicitaron ver el cuerpo.
“Nos dijo que había quedado irreconocible, que la imagen era muy fuerte, y que no lo podía mostrar, pero terminó mostrándole a mi cuñada una foto, pero ella no lo reconoció y la detective preguntó por algún lunar o tatuaje, y al siguiente día (lunes 29 de julio) me llamó para corroborar que era él”, comentó Sandra.
VEHÍCULO
Sandra seguía cuestionando acerca del carro de su esposo, y preciso en ese momento la detective le dijo que lo acababan de encontrar estacionado en Charlotte, en el área de Eastway Park, cerca de donde vive la clienta que lo había contratado.
“Yo solo quiero que investiguen por qué le hicieron eso, y creo que hay un motivo por el que no lo podían dejar vivo, no pensaron que tuviera dos hijos, un hombre sin problemas. Buscó que haya justicia. Esperamos que haya justicia, que no se olviden de esto”, expresó.
La colombiana también dijo, que teme por la seguridad de ella y sus hijos, debido a la peligrosidad de las personas que cegaron la vida de su esposo.
La investigación del homicidio continúa abierta en manos de las autoridades del condado Caldwell, en colaboración con el Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg (CMPD).
AYUDA
La tragedia de esta familia va más allá, pues ahora Sandra se ha quedado sola y a cargo de sus dos hijos. Aunque trabaja, dice que lo que gana no es suficiente para llevar su hogar como lo hacía su esposo, quien también tenía un trabajo en una fábrica. De hecho, varios de sus clientes eran trabajadores de esa fábrica.
Para solventar parte de los gastos Sandra tiene en estos momentos, y lo que viene con las exequias de su esposo Jeimy, tuvo que crear una recaudación de fondos en la plataforma de Gofundme, con la meta de recolectar $20,000
** Esta noticia es una colaboración de: Enlace Latino NC