Milwaukee (EE.UU.), 14 jul (EFE).- La exembajadora estadounidense ante la ONU Nikki Haley, quien fuera la última precandidata republicana en tirar la toalla frente al exmandatario Donald Trump en la lucha por la nominación del partido para la Casa Blanca, ha sido invitada de última hora a la convención que encumbrará a su rival.
Haley no estaba incluida en el programa original y su equipo había confirmado hace poco que no iba a estar presente en Milwaukee, pero su portavoz, Chaney Denton, indicó este domingo a medios estadounidenses que finalmente será una de las oradoras.
La convención republicana se celebrará desde este lunes y hasta el jueves en Milwaukee y su intervención, según el diario The Washington Post, está prevista para el martes. La agenda de la cita no ofrece todavía un plan detallado de los oradores.
El anuncio tiene lugar un día después de que Trump (2017-2021) resultara herido durante un mitin en Butler (Pensilvania). Un hombre disparó desde fuera del recinto y el exmandatario fue alcanzado por una bala en la oreja derecha.
Murió una persona, el agresor fue abatido por las fuerzas del orden y hubo dos heridos.
Según el diario The Wall Street Journal, lo sucedido ha hecho que los republicanos quieran ofrecer una imagen de unidad y la participación de Haley responde a ese objetivo.
Haley anunció el pasado 9 de julio que liberaba a sus 97 delegados para que estos voten a favor de Trump en esta convención, donde el expresidente necesita los votos de 1.215 delegados para hacerse con la nominación, aunque ya la tiene asegurada matemáticamente porque en el proceso de primarias consiguió 2.268.
La también exgobernadora de Carolina del Sur se hizo solo con esos 97 y acabó renunciando el pasado marzo tras el batacazo que sufrió en el Supermartes, día en que un mayor número de estados acudió a las urnas.
Cuando anunció que tiraba la toalla incumplió la tradición histórica de respaldar públicamente a su rival de cara a las elecciones de noviembre y, en su lugar, exhortó a Trump a ganarse la confianza de sus votantes. En mayo cambió de postura y decidió darle su apoyo, y finalmente este mes liberó a sus delegados.