Washington, 10 jul (EFE).- La congresista demócrata Alexandria Ocasio-Cortez presentó este miércoles una resolución que busca someter a un juicio político a dos de los jueces conservadores del Tribunal Supremo de EE.UU., Clarence Thomas y Samuel Alito, por no informar de millonarios obsequios, entre otras fallas éticas y de conducta.
La representante a la Cámara Baja del ala más progresista del Partido Demócrata señaló en un comunicado que la conducta de ambos jueces merece el juicio político para su “destitución” y su “inhabilitación”.
“El hecho de que los jueces Thomas y Alito no hayan revelado durante décadas ante el tribunal que recibieron millones de dólares en obsequios de personas con negocios es explícitamente contrario a la ley”, señaló la congresista del ala más progresista del Partido Demócrata al presentar la resolución.
Agregó que el Congreso tiene “la obligación legal, moral y democrática de realizar un ‘impeachment’ (juicio político)” dada la incapacidad del tribunal para preservar su propia conducta.
La demócrata cargó contra el Supremo por “la crisis de corrupción que se despliega dentro del tribunal” y urgió a actuar para atajar estos “enredos financieros”.
Subrayó que el juez Thomas “incurrió en delitos graves y faltas al negarse a informar de la fuente, descripción y valor de obsequios” recibidos.
“En el transcurso de al menos 15 años, el juez Thomas y su esposa, Virginia ‘Ginni’ Thomas, han recibido obsequios de valor significativo de Harlan Crow (un empresario de la construcción) sin informar la fuente, la descripción y el valor de dichos obsequios”, señala la resolución.
La resolución contra Alito pide también su destitución por “negarse a recusarse en casos en los que tuviera un sesgo o prejuicio personal” y “no revelar ingresos financieros, obsequios y reembolsos, intereses de propiedad, pasivos y transacciones”, entre otros.
La semana pasada los senadores demócratas Sheldon Whitehouse y Ron Wyden solicitaron al Departamento de Justicia que investigue penalmente al juez Thomas por supuestamente violar las leyes federales de ética e impuestos al recibir de sus donantes viajes regalados, al igual que un préstamo de 267.000 dólares, que fue condonado.
En junio pasado, Ocasio-Cortez y el congresista Jamie Raskin organizaron una mesa redonda sobre los estándares del Supremo de EE.UU. y la crisis de ética en el país.
Ese mismo mes escribieron una carta al presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, para saber “qué medidas inmediatas tomaría para restaurar la confianza pública en la Corte en medio de graves conflictos éticos”, según la congresista demócrata.