Ciudad de México, 15 mar (EFE).- Enseñar no es fácil y las formadoras en igualdad de género afrontan “un segundo reto”, porque “al hablar de feminismo” reciben “una hostilidad que va desde las palabras hasta la interacción”, asegura la fundadora de la Escuela Feminista de Comunicación, Raquel Ramírez Salgado.
Ramírez Salgado explica en una entrevista, en el marco del evento de Diálogos EFE 'Visibilizar la economía del cuidado en Latinoamérica’, que, como docente, ha vivido de primera mano la enseñanza de temas para transversalizar la perspectiva de género a audiencias de cualquier edad.
Y afirma que en las más jóvenes todavía hay “un machismo recalcitrante”.
“Hay una romantización de la juventud (…) y uno no puede dar por sentado la reacción de los jóvenes, todavía hay mucha resistencia a darse cuenta de la realidad”, sostiene la investigadora, quien fue panelista del encuentro organizado en la Ciudad de México por la Agencia EFE en colaboración con la red de apoyo internacional Open Society Foundations.
Una escuela feminista
Para Ramírez, esta “lucha por el diálogo” para poner en el centro temas que “sostienen al mundo”, como las tareas del cuidado, es fundamental, por lo que en 2019 funda la Escuela de Comunicación Feminista en México.
“La nombro ‘feminista’ porque me parece que no hay que titubear, esta sigue siendo una palabra incómoda, pero hay que ponerle nombre y apellido a las cosas para que se entienda cuál es la mirada, es un acto de honestidad”, apunta.
También recalca que la escuela busca construir “audiencias críticas” mediante un “respaldo teórico feminista”, que básicamente se traduce en una “geneaología de décadas de trabajo de mujeres” que se dedican a la comunicación y la pedagogía con un enfoque feminista.
Durante la charla, la entrevistada cita a autoras como a la española Celia Amorós o la estadounidense Betty Friedan, ejemplos de mujeres que son parte de la base teórica de esta escuela.
Además de la metodología y la teoría, la fundadora argumenta que este centro educativo también “es un pretexto para que las mujeres puedan problematizar su propia vida”.
“Hablar desde la cotidianidad nos permite entendernos como humanos”, comenta.
El derecho a una soledad comunitaria
Ante un escenario futuro en el que dentro de 46 años las personas mayores de 60 años triplicarán la población en México, según datos del Consejo Nacional de Población (Conapo), Ramírez plantea sobre las tareas del cuidado la necesidad de debatir públicamente “el derecho a la soledad comunitaria”, principalmente para las mujeres.
“Estar sola en el mundo es muy complicado y el mundo es un lugar hostil contra las personas y en particular contra las mujeres”, sentencia.
De acuerdo con la experta en temas de género, actualmente hay muchas mujeres que están tomando la decisión de estar solas, se están cuestionando si se casan o divorcian, y eso “tiene un impacto social”, por lo que considera que es importante “cuidarnos entre nosotras” y hacer “comunidad”.
Sobre este derecho, la doctora en Ciencias Políticas y Sociales, lamenta que las administraciones de los gobiernos no estén “vinculadas”, porque eso les impide hacer políticas que miren al futuro, pero reconoce que la sociedad civil está discutiendo y comprometiéndose con este tema.
EFE cuenta con el apoyo de Open Society Foundations en la elaboración de este contenido.