Paola Delgado | [email protected]
Cuando estaba en el ‘Latin Festival 2023’ se me acercó Jorge Enrique Muñoz, con la intención de anunciarse en mi programa de radio. Indagando más, no sólo de su profesión sino también del ser humano, descubrí una historia digna de publicar.
Jorge residía en Colombia, con su esposa e hijas, hace apenas 6 años. Graduado de Leyes en la Universidad del Rosario, y con un MBA de la Universidad de Los Andes, quiso emprender el camino de su profesión en Estados Unidos, y terminó su Maestría en Derecho en Miami, Florida.
Soy fiel creyente que entre el anhelo y la ejecución de un sueño hay un trayecto poco placentero, un proceso lleno de sacrificios, perseverancia y disciplina que sólo se consiguen con mucha dedicación.
No obstante, con una personalidad que ve los obstáculos como retos, Jorge se propuso estudiar hasta el cansancio para pasar el examen del BAR, la prueba para ser abogado en Estados Unidos, y lograr representar a los que como él, llegan a este país llenos de anhelos sumados a las angustias propias de los procesos migratorios.
Cuenta con un don de gente tan vital para interactuar con una honestidad y una franqueza admirable que se añora actualmente en esta nación. Tras la creciente ola migratoria, no da falsas esperanzas y la comunicación con su oficina es eficaz.
Esta columna no está diseñada como parte del paquete publicitario, pero decidí hacerla porque el ser humano detrás del abogado Jorge Enrique Muñoz, lo hace un profesional ideal para todos aquellos que aún no han encontrado en quien depositar su confianza en el ámbito legal a nivel migratorio.
Búscalo en: www.inmigrandoconjorge.com