Los Ángeles, 28 dic (EFE).- El Departamento de Justicia (DOJ) del Gobierno estadounidense advirtió este jueves al gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, que presentará una demanda si el estado avanza hacia la aplicación de la ley SB4, que otorga a autoridades estatales el poder de expulsar a migrantes del país, reportó el periódico Houston Chronicle.
En una carta al gobernador obtenida por el diario, el vicefiscal general Brian Boynton indicó que la ley, que Abbott firmó el 18 de diciembre, “es inconstitucional y obstaculizará las operaciones del Gobierno federal para aplicar la ley de inmigración”.
La misiva indica que si Abbott no confirma para el 3 de enero que el estado se abstendrá de aplicar la SB4, “Estados Unidos recurrirá a todos los remedios legales apropiados para asegurar que Texas no interfiera con las funciones del Gobierno federal”.
La ley, aprobada por la Legislatura texana en noviembre y cuya entrada en vigor se prevé para marzo, convierte en delito menor el que un extranjero “ingrese o intente ingresar al estado desde una nación extranjera” de forma irregular. La falta se convierte en un crimen grave, punible hasta con 20 años de prisión, si el infractor es reincidente.
La SB4 permite a la justicia estatal ordenar la expulsión de personas sin mediar proceso judicial. Asimismo, los oficiales de policía podrán arrestar a cualquier individuo del que sospechen que ingresó ilegalmente al país, y tendrán la facultad discrecional de expulsarlo a México en vez de arrestarlo.
Considerada una de las leyes antiinmigrantes más estrictas en la historia estadounidense, la SB4 se suma a otras medidas que Abbott ha instrumentado como parte de su Operación Estrella Solitaria contra la inmigración irregular, a la que han sido asignados más de 11.000 millones de dólares desde 2021 y que ha incluido la colocación de un cerco de alambre de púas y una barrera de boyas en el fronterizo Río Grande (Río Bravo en México).
Un día después de la firma de la SB4, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, calificó a Abbott de “señor de malas entrañas” por sus políticas migratorias y anunció que impugnará la ley.
“Se está haciendo ya un trámite en (la Secretaría de) Relaciones Exteriores para impugnar esta ley y, además, nosotros vamos a estar siempre en contra de estas medidas. (Quiero) decirles a nuestros paisanos y a los migrantes que vamos a estarlos defendiendo”, dijo en conferencia de prensa.
Asimismo, la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) de Texas y el Proyecto de Derechos Civiles de Texas (TCRP) presentaron el 19 de diciembre ante la Corte Federal del Distrito Oeste de Texas una demanda contra la SB4, argumentando que es inconstitucional porque viola la Cláusula de Supremacía de la Constitución de Estados Unidos.