Nueva York, 13 dic (EFE).- Tesla llamará a revisión a más de dos millones de vehículos para corregir un problema de seguridad en su sistema de conducción autónoma, que la compañía asegura que puede ser solventado con una actualización inalámbrica de software que se ofrecerá de forma gratuita.
Esta iniciativa ha sido comunicada después de que la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carretera de EEUU (NHTSA) detectara, tras una investigación de varios años, que los controles del piloto automático instalados en miles de vehículos de Tesla no son capaces de evitar un “uso indebido” en determinadas circunstancias que podría derivar en “un mayor riesgo de accidente”.
Según la comunicación publicada por el mayor regulador de seguridad automovilística de EEUU, “en determinadas circunstancias, cuando se activa el giro automático, la prominencia y el alcance de los controles de la función pueden no ser suficientes para evitar que el conductor haga un mal uso de la función de asistencia avanzada al conductor SAE Nivel 2”.
Se trata de la segunda vez durante este año que Tesla, propiedad del controvertido Elon Musk, llama a revisar parte de sus vehículos en el mercado por algún problema detectado en sus sistemas de conducción cada vez más automatizada, objeto de un estrecho escrutinio después de que hayan sido vinculados con los motivos de cientos de accidentes.