São Paulo, 1 dic (EFE).- Uno de los ejes de la planificación estratégica de Brasil, desde que el progresista Luiz Inácio Lula da Silva asumió la presidencia en enero, es restablecer y estrechar lazos con Latinoamérica, mercado en que el país busca recuperar el espacio perdido en los últimos años.
Así lo ha destacado en una entrevista con la Agencia EFE el presidente de la Agencia Brasileña de Promoción de Exportaciones e Inversiones (ApexBrasil), Jorge Viana, quien consideró que “hay una enorme ventana” para ampliar las relaciones comerciales y diplomáticas.
“Es una prioridad de este Gobierno promover la integración comercial entre los países latinoamericanos. Brasil pretende recuperar el liderazgo económico y comercial, así como el liderazgo en proyectos medioambientales, energéticos y de infraestructuras en la región”, explicó.
20 años de decadencia
En los últimos 20 años, Brasil ha perdido peso en el comercio suramericano; en 2003, Brasil era el principal socio comercial de sus vecinos y sus productos representaban el 17 % de las importaciones de los países suramericanos, pero ese porcentaje se ha reducido al 12,7% en 2022.
En especial, Brasil ha perdido en los últimos años el 40 % de su flujo comercial con Argentina, su mayor socio comercial en la región, según señaló Viana, quien espera revertir estas cifras.
Para el presidente de ApexBrasil, una creciente integración con Latinoamérica también “aumentará el atractivo de la región para atraer inversiones y para impulsar la innovación”.
Suramérica y Mercosur, principales socios comerciales
En 2022, el comercio de Brasil con los países suramericanos ascendió a 73.700 millones de dólares, lo que otorga a la región la posición de tercer socio comercial de Brasil, por detrás de China y de Estados Unidos.
Por otro lado, el Mercosur, bloque económico formado por Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, es el cuarto destino de las exportaciones brasileñas, por detrás de China, EE.UU. y la Unión Europea, con un 4,9 % del total exportado en 2022, especialmente de vehículos, petróleo, maquinaria, electrónicos, plásticos o hierro.
Así, con el objetivo de estimular más negocios e inversiones, Brasil organizó un encuentro con empresarios y patronales agropecuarias e industriales el pasado octubre, en Colombia, donde se han mapeado más de 1.500 oportunidades y que tiene a Brasil como su tercer mayor proveedor.
Según un estudio lanzado por ApexBrasil este año, Suramérica ofrece más de 13.000 oportunidades comerciales.
“Invertir en asociaciones estratégicas en América del Sur no solo impulsa nuestra economía, sino que también solidifica la imagen de Brasil como socio comercial”, sostuvo Viana.
Centroamérica y México
Respecto a los países de Centroamérica y México, las relaciones comerciales con Brasil generaron el año pasado 19.700 millones de dólares, cifras que están a mucha distancia de los datos del intercambio de esos países con Estados Unidos.
“En nuestra opinión, hay mucho espacio para ampliar nuestra participación, intensificando una relación que también podría incluir el aumento de las compras brasileñas a estos países. Un ejemplo es la demanda de proteína animal en el Caribe, que actualmente es atendida principalmente por Estados Unidos”, resaltó Viana.
Para ampliar la participación en estos mercados, ApexBrasil realizó un encuentro comercial en octubre en Panamá, país considerado estratégico geográficamente por ser una plataforma de conexión entre América y Asia.
Los retos de la integración
Viana subrayó que, aunque Latinoamérica es un socio tradicional para Brasil, “históricamente, el mercado brasileño y de los demás países de la región se han estructurado de forma complementaria a los mercados de los países desarrollados”.
Por ello, el “avance del comercio intrarregional pasa por la necesidad de mejorar las conexiones logísticas de América Latina, buscando una complementariedad y promoviendo un desarrollo interno”.
El presidente de Apex Brasil, entidad con la que la Agencia EFE mantiene un acuerdo de difusión de contenidos, concluyó insistiendo en la importancia de volver a aproximarse al mercado latinoamericano dada la proximidad geográfica y los lazos culturales que los unen, de manera que crezcan sus empresas conjuntamente.