Chicago (EE.UU.), 3 nov (EFE).- Una bandeja de Steph Curry con 0.2 segundos por jugar en el cuarto período, tocada aparentemente por Draymond Green, le dio este viernes a los Golden State Warriors un vibrante triunfo por 141-139 en el campo de los Oklahoma City Thunder.
Los Warriors sumaron su quinta victoria consecutiva y la cuarta en cuatro partidos jugados fuera de casa este año, en un partido de enorme intensidad acabado con una larga revisión de los árbitros en la jugada decisiva.
Con empate 139-139, Curry, que acabó con 28 puntos, ocho rebotes, siete asistencias y cinco triples, entró en la pintura y pareció anotar dos puntos, aunque los árbitros revisaron la jugada por una posible interferencia de Draymond Green.
Tras varios minutos, y viendo que Josh Giddey, de los Thunder, tocó la red de la canasta antes del presunto toque de Green al aro, los árbitros concedieron los dos puntos a los Warriors.
La canasta fue finalmente entregada de manera oficial a Green, según las estadísticas oficiales de la NBA.
Los Warriors abrieron con un triunfo vibrante la nueva NBA Cup, en una noche en la que Curry ya había regalado espectáculo al ofrecer una asistencia sin mirar para un alley-oop de Gary Payton II.
Los Thunder, que no pudieron contar con su estrella Shai Gilgeous Alexander, cayeron pese a tirar con un 60 % de acierto desde el campo y con un 51 % desde la línea de tres puntos.
Su mejor anotador fue Lunguentz Dort con 29 puntos y un perfecto seis de seis en triples. Chet Holmgren acabó con 24 puntos e intercambió su camiseta con Curry al acabar el partido.
Los Warriors y los Thunder están encuadrados en el grupo C del Oeste junto a Minnesota Timberwolves, Sacramento Kings y San Antonio Spurs.
La NBA Cup se disputa de este viernes al próximo 9 de diciembre, con una fase de grupos y una de eliminación directa que llevará a la final a cuatro de Las vegas.
En la fase de grupos, los partidos tendrán un doble valor, ya que se contarán tanto para el torneo como para la temporada regular.
La T-Mobile Arena de Las Vegas acogerá la Final a cuatro del 7 al 9 de diciembre.
Se trata de una idea de la NBA para aumentar el nivel competitivo durante su larga temporada regular, de 82 partidos, y evitar que haya encuentros con poco en juego.
A la competición deportiva se sumará además un importante aliciente económico, pues cada jugador del equipo ganador se llevará medio millón de dólares.