Miami, 20 abr (EFE).- España aspira a ser el “país emprendedor con mayor impacto social de la Historia”, siguiendo un modelo distinto al de brindar incentivos fiscales a las empresas y “sin olvidar a la gente ni dejar a nadie detrás”, dice a Efe Francisco Polo, Alto Comisionado de España Nación Emprendedora.
Polo se encuentra en Miami, donde ha intervenido en la feria de innovación eMerge Americas y tiene citas con interesados en las oportunidades que brinda España en inversiones y talento, materias en las que la Ley de Startups va a significar una “auténtica revolución”, según sus palabras.
El Alto Comisionado da por seguro que el Congreso español aprobará la ley a fines de año, pues es “un hito” del Plan de Recuperación y Resiliencia para el que la Unión Europea ha asignado fondos millonarios.
La ley, cuyo anteproyecto fue aprobado en diciembre y en cuya elaboración ha participado la ciudadanía, es una de las 50 medidas de una estrategia a diez años y apoyada con 4.200 millones de euros para transformar las bases productivas del país.
Según expuso Polo ayer ante la feria eMerge Americas, la ley puede suponer cifras de inversión de los fondos de capital riesgo en España “todavía mejores” que las de 2021, cuando se logró el récord histórico de 4.294 millones de euros, cantidad cuatro veces mayor a la de 2020.
UNA LEY REVOLUCIONARIA
Entre otras novedades va a dotar a España del mejor tratamiento de “stock options” de toda Europa, va a crear una nueva categoría de visado para nómadas digitales y aumentar, en el caso de un inversor o emprendedor, la vigencia del visado inicial de residencia de 1 a 3 años.
La ley prevé también una reducción de impuestos durante cinco años para emprendedores e inversores, entre otras medidas.
En su entrevista con Efe, insistió en que la ley va a traer “dos grandes revoluciones en el terreno de la inversión y en el terreno del talento”.
En el primero destacó que se da rango de ley a la figura legal dedicada a los impuestos que paga un fondo de capital riesgo cuando tiene beneficios.
“El que no tuviera rango de ley generaba cierta inseguridad jurídica para los fondos de capital riesgo. Ahora, esperamos atraer muchos más fondos de capital riesgo y gestoras de fondos de capital riesgo y por lo tanto, ayudar a solucionar el reto de la inversión en startups en nuestro país”.
La eliminación del requisito de obtener el NIE, el número de identificación de extranjeros, para poder invertir en una startup es otro de los cambios que van a hacer a España más atractiva para el inversor.
EL EMPRENDIMIENTO, EL “ROMPEHIELOS” DEL CAMBIO
El “rompehielos” para avanzar hacia el cambio en las bases productiva es el emprendimiento innovador, dice Polo, que define su puesto de alto comisionado para España Nación Innovadora como “una especie de startup en la Presidencia del Gobierno” español.
Polo dice haber notado durante su visita a Miami “interés” en esta estrategia del Gobierno español,
“En España tenemos un muy buen tejido de startups (…) y ahora por primera vez tenemos una política pública para articular una de las palancas de transformación de la productividad en un país”, como lo es el sector del emprendimiento innovador, junto a la educación y la ciencia, asegura.
A una pregunta de Efe sobre si se podría comparar con lo que hizo el gobierno de Irlanda para atraer empresas al país, Polo responde que es “totalmente distinto” y no busca competir con incentivos fiscales.
“El problema que queremos solucionar en origen es que el significado de crisis económica no siga teniendo en España el sentido que ha tenido hasta ahora”, dice.
CRISIS Y RESILENCIA
España tardó mucho más tiempo que otros países europeos en recuperarse de la crisis del 2008 porque, a su juicio, tenía “un modelo económico basado en empleos de poca aportación de valor y esos empleos son los primeros que se destruyen la crisis económica y se genera, por lo tanto, un enorme sufrimiento entre la población”.
“El objetivo de la estrategia España emprendedora es cambiar el modelo productivo para generar más empleo, de más calidad y para que la gente pueda desarrollar en plenitud su proyecto de vida”, dice.
Se trata también de “cerrar la brecha de género, la brecha territorial, la brecha socioeconómica y la brecha generacional”.
Pero, además, Polo subrayó que el Gobierno busca incorporar a la estrategia los diez principales sectores de la economía española, que representan el 60 % del PIB.
“Porque lo que queremos es que esa capacidad de innovación, de generación de empleo, de generación de mejores productos, servicios o operaciones que tiene el sector del emprendimiento innovador, se transfiera del grueso de la economía”.
“Queremos que las empresas españolas también sean más competitivas, más resistentes a los golpes de las crisis económicas y más resilientes”, aseveró.