Macuelizo (Honduras), 30 ago (EFE).- Macuelizo, un municipio pobre en el occidente de Honduras, conmemoró sus 229 años de fundación con un concurso de canto con niños como sus principales protagonistas, y echando de menos a los centenares de sus paisanos que han migrado a otros países en busca de un futuro mejor.
“Estamos trabajando con mucha entrega, tenemos muchos problemas que todavía no encontramos cómo solucionarlos porque son bastante grandes. Especialmente me refiero al tema migratorio de nuestro municipio”, dijo a EFE la alcaldesa de Macuelizo, Jacqueline Trejo.
LA MAYORÍA MIGRA POR LA POBREZA Y LA VIOLENCIA
El municipio, con alrededor de 40.000 habitantes, se localiza en el departamento de Santa Bárbara, en el occidente de Honduras, y según relató Trejo, la migración, principalmente a Estados Unidos y España, ha aumentado de manera acelerada en los últimos diez años.
“Es normal cuando uno llega a las comunidades y pregunta por María o por Juan, que se fueron para Estados Unidos, y luego dicen por qué: porque no tenían empleo, otros porque su esposo o esposa los mando a traer”, entre otras razones, subrayó Trejo, quien en noviembre de 2021 fue electa alcaldesa de Macuelizo.
Los agricultores tampoco encuentran mano de obra, por lo que tienen que buscar trabajadores en Guatemala para cortar el café, o sembrar maíz y fríjoles, aunque los pobres del municipio y sus aldeas en su mayoría se dedican a una agricultura de subsistencia.
Honduras no solo es un país de tránsito para decenas de miles de migrantes suramericanos, asiáticos y africanos, que todos los años cruzan su territorio en busca de llegar a Estados Unidos, sino que también sufre una masiva migración por la pobreza y la violencia.
Los migrantes en EE.UU. y España, entre otros países, envían cada año remesas familiares que en 2022 sumaron unos 9.000 millones de dólares, que representan el 25 % de su Producto Interno Bruto (PIB).
MUCHOS NIÑOS SE QUEDAN SOLO CON LOS ABUELOS
Trejo considera que ante la pobreza, la migración y otros problemas que enfrenta Macuelizo, incluyendo el cambio climático, la comunidad pronto podría sufrir una “inseguridad alimentaria”.
La migración, que en muchos casos es por la violencia criminal, también se ve reflejada en Macuelizo en un alto porcentaje de mujeres que son jefas de familia.
“Lo más lamentable que ahora estamos enfrentando con mucho dolor, es que en Macuelizo tenemos 54 adolescentes embarazadas porque se quedaron nada más con una figura materna, sin el apoyo de un padre”, dijo Trejo, quien además lamentó que por la migración muchos niños y niñas se terminan quedando solamente con los abuelos.
Macuelizo, fundado por nacionales el 19 de agosto de 1794, según apuntes históricos, tiene su origen en un árbol de flores rosadas del mismo nombre que abunda en Honduras.
UNA GUITARRA PARA QUE LOS NIÑOS NO SE VAYAN
Los problemas de Macuelizo son similares a los de la mayoría de los 298 municipios que tiene Honduras, un país de 112.492 kilómetros cuadrados, con alrededor de diez millones de habitantes, de los que el 73 % son pobres, según fuentes oficiales.
En Macuelizo la única fuente de trabajo es una empresa azucarera, pero solo durante los seis meses que dura la zafra, afirmó Trejo.
Macuelizo también necesita mejorar las condiciones de educación y salud para su población, acotó Trejo, quien está impulsando la creación de una clínica sanitaria con médico para atender a los pacientes de las 15:00 horas locales (21:00 GMT) en adelante, cuando cesa la jornada laboral de ocho horas del sistema de salud pública.
La alcaldesa, que festejó con su pueblo el 229 aniversario de fundación con actividades cívicas y culturales, auspicia una cruzada dedicada a niños y niñas de Macuelizo y aldeas vecinas para que aprendan a ejecutar la guitarra y no piensen en migrar, para quienes ya ha conseguido más de 80 y varios instructores.
“Ahora tenemos 60 niños y niñas que están aprendiendo a tocar guitarra, algunas donadas y otras compradas con dinero que nos dieron hijos e hijas de Macuelizo (migrantes) en Estados Unidos y amigos en ese país”, dijo Trejo.
TODOS TIENEN UN FAMILIAR MIGRANTE EN EE.UU.
Uno de los maestros de música en Macuelizo es Juan Francisco Vásquez, quien alterna la actividad artística con su trabajo formal de mecánico automotriz.
Vásquez, casado y padre de dos hijos, dijo a EFE que uno de sus dos vástagos, de 17 años, se fue en 2022 de manera ilegal para Houston, Estados Unidos, donde además tiene un primo migrante.
Añadió que en su caso, por asuntos de edad, solamente se iría para Estados Unidos si fuera “con toda la familia”.
Karol Vanessa Martínez, empleada de la Municipalidad de Macuelizo, indicó a EFE que tiene primos y otros parientes migrantes que por la falta de oportunidades en Honduras, se fueron de manera ilegal a Estados Unidos.
Uno de sus parientes es un médico, quien después de graduarse quiso emprender su propio negocio, pero lo que ganaba era muy poco, por lo que “tomó la decisión de irse a otro país para buscar mejores beneficios para él y su familia”.
La misma alcaldesa Jacqueline Trejo echa de menos a su única hija, una sicóloga de profesión, de 30 años, quien hace casi un lustro decidió quedarse de manera ilegal en Estados Unidos, porque en su país no pudo conseguir un empleo.
“Esa es mi triste realidad, mi hija tuvo que irse a pesar de que es sicóloga. No pudo encontrar trabajo, le fue negado ese derecho”, recuerda Trejo con nostalgia y admiración por su hija.