Ciudad de México, 20 jun (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, reveló este martes que firmará una carta con varios homólogos latinoamericanos para pedir a su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, que interceda por la crisis financiera de Argentina.
“Ayer me mandaron una carta que se quiere enviar al presidente Biden, de algunos presidentes de América, para que se ayude al pueblo de Argentina a salir de su crisis económica, financiera, y que el Fondo Monetario Internacional (FMI) asuma su responsabilidad”, expresó en su conferencia matutina.
“Porque ¿cómo no va saber un banco si un cliente tiene o no tiene solvencia? Y voy a firmar la carta, la voy a firmar, ya después informamos (del contenido), pero yo sí la firmo porque se tiene que ayudar a Argentina”, añadió el mandatario.
López Obrador respaldó a su aliado, el presidente argentino Alberto Fernández, al responsabilizar a su antecesor, Mauricio Macri (2015-2019), de la crisis que padece el país suramericano por la deuda que tiene con el FMI.
El gobernante mexicano aseveró que Fernández “recibió a Argentina, la hacienda pública de Argentina, con un endeudamiento exagerado” porque “los conservadores y la derecha de Argentina” querían que se reeligiera Macri con el apoyo de Estados Unidos y organismos internacionales.
“Entonces, como hay alianzas, sobre todo con organismos financieros internacionales, también con gobiernos extranjeros, se le otorgaron créditos a Argentina más allá de su capacidad de pago para que derramaran recursos antes de la elección y Macri quedara de nuevo como presidente”, sostuvo.
López Obrador justificó mandarle la carta a Biden al denunciar la presunta responsabilidad de funcionarios estadounidenses en la crisis financiera de Argentina.
“El Fondo Monetario Internacional autorizó por consigna de políticos de Estados Unidos créditos que de antemano sabían que no se iban a poder pagar”, aseguró.
El gobernante mexicano hizo eco de los argumentos del peronismo argentino.
La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández, cuestionó el jueves pasado al FMI por haber concedido en 2018 al entonces Gobierno de Macri préstamos por unos 50.000 millones de dólares que el actual Ejecutivo debió acordar refinanciar en marzo de 2022 por la falta de condiciones para afrontar esa deuda.