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De acuerdo con la Asociación Estadounidense de Bibliotecas (ALA, sigla por su nombre en inglés), 2.571 es la cifra de títulos de libros prohibidos en Estados Unidos en el 2022, mientras Florida tiene leyes que dan penas de cárcel de hasta cinco años para profesores y bibliotecarios que dejen de cumplir la censura.
La revisión de libros que hablan de racismo, gracias a leyes aprobadas por el gobernador Ron DeSantis a través de la ley HB-1467, promulgada por la legislatura de Florida, desde el momento que entró en efecto, el pasado 1 de julio de 2022, suscita, de cuando en cuando, protestas estudiantiles con pancartas que dicen: “Prohibir los libros y la historia no es libertad”.
PERSONAJES
Debido al contexto anterior, entre los libros prohibidos se encuentran los que hablan de Roberto Clemente, Celia Cruz y Sonia Sotomayor.
Clemente, apodado ‘El Grande’, fue un jugador profesional de béisbol puertorriqueño que actuaba de jardinero derecho. Él desarrolló su carrera de pelotero en los Pittsburgh Pirates de las Grandes Ligas de Béisbol y afrontó la discriminación racial en la sociedad y en el deporte de la pelota caliente, en Estados Unidos, por el simple hecho del color de su piel.
Cruz, ‘La Reina de la Salsa’, fue una cantante cubana-estadounidense de música tropical; y Sotomayor, es magistrada de la Corte Suprema. En los libros sancionados, en cada uno de ellos, los personajes hablaron de sus vivencias, en una sociedad donde el racismo era evidente.
RESULTADOS
Los textos prohibidos, en las escuelas del Condado de Duval, noreste de Florida, han tenido repercusión en la comunidad hispana inmigrante.
En la lista de los 2.571 libros sancionados se encuentra “Ojos azules” de Chloe Ardelia Wolfford, conocida como Toni Morrison, escritora y profesora estadounidense que ganó el Premio Pulitzer en 1988 y el Premio Nobel de Literatura en 1993. En 1960 se convirtió en la primera editora negra de ficción en Random House, en Nueva York.
“Ojos azules” es una novela realista que pone al lector ante el espejo de la discriminación racial, de la suerte que el género humano tiene para nacer en un lugar y no en otro.
CONTRARIOS
Miembros de ALA han expresado que una avalancha de políticos republicanos, organizaciones de la sociedad civil con vínculos conservadores y asociaciones de padres y madres han conseguido el retiro de miles de obras que abordan temas raciales, de la comunidad LGTBIQ+, de la sexualidad, del suicidio o de la drogadicción.
Lo curioso de la prohibición en Florida es que la misma se registra en Alabama y Texas, pero no solo con libros que salen de la imprenta y que aún tienen su olor a tinta fresca, sino con textos clásicos que han sido leídos y analizados por estudiantes estadounidenses durante décadas como es el caso de “Matar a un ruiseñor”, escrito por Harper Lee, y considerada un clásico estadounidense “debido a la violencia y el uso de la palabra N (en inglés hace referencia a Negro, un término despectivo, cuando se utiliza como un término despectivo, no como la autora lo utiliza en la novela que ganó el Premio Pulitzer en 1991.