Nueva York, 24 abr (EFE).- El banco estadounidense First Republic, uno de los más castigados en la reciente crisis, desveló este lunes que durante el primer trimestre sus depósitos se redujeron en más de un 40 %, pero aseguró que la situación está estabilizada y que ahora emprenderá medidas para enderezar su negocio, incluido un recorte de entre el 20 y el 25 % de su plantilla.
La entidad californiana, que se vio arrastrada por las turbulencias desatadas por el colapso del Silicon Valley Bank (SVB), presentó hoy sus cuentas trimestrales, que arrojan luz sobre la crisis que vivió y que llevó a una decena de grandes bancos a acudir a su rescate e inyectar 30.000 millones de dólares (27.160 millones de euros al cambio actual).
“Con el cierre de varios bancos en marzo, experimentamos salidas de depósitos sin precedentes. Actuamos con rapidez y usamos nuestras carteras de préstamos y valores de alta calidad para conseguir liquidez adicional”, explicó en un comunicado el jefe financiero de First Republic Bank, Neal Holland.
Según indicó, ahora la entidad está trabajando para reestructurar su balance y reducir gastos y préstamos a corto plazo.
Las cuentas de la entidad muestran una enorme salida de depósitos, que ahora suman 104.500 millones de dólares, un 40,8 % menos que al cierre de 2022 y un 35,5 % menos que en el mismo periodo del año pasado.
Esa cifra incluye además los 30.000 millones de dólares aportados por la gran banca estadounidense, sin los cuales la caída habría sido aún mayor, de cerca de 100.000 millones de dólares en total.
Según First Republic, la rápida huida de dinero que sufrió a partir del 10 de marzo con el colapso del SVB se vio frenada tras ese rescate y para la semana del 27 de marzo la situación había comenzado a estabilizarse.
A fecha 21 de abril, el banco tenía depósitos por valor de 102.700 millones e dólares, sólo un 1,7 % menos que al cierre de marzo y consecuencia sobre todo del pago de impuestos que muchos clientes tienen que hacer en abril.
Como parte de su presentación de resultados, First Republic anunció planes para reforzar su salud financiera, que incluyen una reducción de su plantilla, recortes en la compensación de sus ejecutivos, menos espacio de oficinas y una rebaja de proyectos no esenciales.
El banco espera recortar su número de empleados entre un 20 y un 25 % durante el segundo trimestre de este año, según explicó en la nota, en la que no dio más detalles sobre los despidos.
En cuanto a los resultados en sí, First Republic ganó en el primer trimestre 229 millones de dólares, un 32,9 % menos que en el mismo periodo del año anterior, pero por encima de las expectativas del mercado.
Las acciones de la entidad, que habían terminado la sesión bursátil con un alza del 12 % a la espera de conocerse la cuentas, caían casi un 17 % en las operaciones electrónicas posteriores al cierre.