Washington, 11 abr (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llamó este martes por teléfono a la familia del periodista estadounidense Evan Gershkovich, detenido en Rusia desde finales de marzo y acusado de espionaje, informó la Casa Blanca.
El mandatario hizo la llamada a bordo del avión presidencial Air Force One, aprovechando el viaje para llegar a la provincia británica de Irlanda del Norte, donde iniciará una gira de cuatro días que también le llevará a la República de Irlanda.
En declaraciones a la prensa a bordo del avión presidencial, John Kirby, uno de los portavoces de la Casa Blanca, explicó que Biden se siente “muy agradecido” por el tiempo que le dedicó la familia de Gershkovich, pero rechazó dar más detalles por respeto a los familiares.
Unas horas después, la familia publicó un comunicado, a través del diario The Wall Street Jounal, para el que trabajaba Gershkovich.
En concreto, la familia expresó agradecimiento a Biden por la llamada y valoró positivamente las garantías que les dio de que el Gobierno está haciendo “todo lo posible” para traer al periodista a casa tan rápido como sea posible.
“Aparte de ser un distinguido periodista, Evan es un hijo y un hermano amado. Hay un agujero en nuestros corazones y en nuestra familia que no volverá a llenarse hasta que nos reunamos de nuevo”, dijeron en el comunicado.
El Departamento de Estado de Estados Unidos declaró ayer lunes el arresto de Gershkovich como un caso de “detención arbitraria”, lo que permite al Gobierno federal redoblar los recursos para conseguir su liberación.
Gershkovich fue detenido el 30 de marzo en Yekaterimburgo, la capital de los Urales, acusado por el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB, antiguo KGB) de espionaje, cargo por el que podría ser condenado a hasta 20 años de cárcel.
El periodista cubría para The Wall Street Journal las informaciones sobre Rusia, Ucrania y las exrepúblicas soviéticas desde enero de 2022.
La última detención de un periodista estadounidense por espionaje tuvo lugar en 1986, en plena Perestroika, e implicó a Nicholas Daniloff, que fue canjeado por un prisionero ruso tres semanas después.
Tanto la Casa Blanca como The Wall Street Journal han negado las acusaciones de las fuerzas de seguridad rusas contra su corresponsal y han exigido su liberación inmediata.