> Nacida en Venezuela, diagnosticada desde temprana edad con atresia tricuspídea, una compleja cardiopatía congénita, ha ampliado el alcance de su organización para incluir a familias hispanas de Jacksonville que también enfrentan esta dura realidad.
Yajaira Machado | [email protected]
Fotos crédito: Álvaro Barrera
Fundadora de la organización sin fines de lucro, Estrellita de Belén, Belén Altuve Blanton es un vivo testimonio de esperanza, resiliencia y propósito.
Nacida en Venezuela y diagnosticada desde temprana edad con atresia tricuspídea, una compleja cardiopatía congénita, Belén enfrentó desde la infancia una realidad médica que para muchos significaría un límite, pero que en su caso se convirtió en su motor de vida.
HISTORIA
En la década de 1960, las cardiopatías congénitas eran prácticamente desconocidas en dicho país sudamericano. Sin embargo, la determinación de sus padres y la intervención providencial del Dr. Iván Machado Atías, quien acababa de regresar de Houston (Estados Unidos), inspirado por el trabajo del renombrado Dr. Denton Cooley, le ofrecieron una oportunidad de sobrevivir.
Desde entonces, Belén vivió con una derivación quirúrgica colocada a los seis meses de edad, sin acceso a los procedimientos más avanzados que hoy en día salvan vidas. Su condición, eventualmente, evolucionó al síndrome de Eisenmenger, haciendo inviable cualquier cirugía futura o trasplante de corazón y pulmón.
LUCHA
A pesar de las limitaciones físicas, Belén encontró su fuerza en la fe, el amor de su familia y una pasión creciente por ayudar a otros.
Su vida dio un giro definitivo cuando decidió canalizar su experiencia en una misión: educar y apoyar a familias afectadas por cardiopatías congénitas.
Hubo un momento oscuro cuando supo que el trasplante no era una opción, pero fue en ese quiebre donde descubrió su verdadero llamado. “Dios lo tenía todo planeado. Esta condición me ha dado un propósito y por eso hasta le doy gracias”, afirmó Belén con convicción.
ORGANIZACIÓN
Así, de esta manera, nació ‘Estrellita de Belén’, una organización dedicada inicialmente a brindar atención médica a niños en Venezuela que padecen enfermedades cardíacas.
Con el paso del tiempo, la fundación creció y cruzó fronteras, convirtiéndose en miembro de redes globales como Global ARCH y la World Heart Federation.
En su camino, Belén ha enfrentado días de dolor, depresión y retos físicos importantes. “Hay días que no me siento bien, pero lo que hago por estos niños me da el aliento para seguir”, confesó.
DESTACADA
En 2024, su historia fue incluida en el libro ‘Mujeres Indetenibles’, convirtiéndose en un Amazon Best Seller en México y Estados Unidos. Hoy, Belén no solo representa una voz en la comunidad global de cardiopatías congénitas, sino también un faro de inspiración.
“Cada día que respiro es un milagro, y quiero que otros encuentren su propósito también”, indicó.
Desde Jacksonville, ciudad donde reside, Belén lidera una nueva etapa de la fundación, ampliando su alcance para incluir a familias hispanas locales que también enfrentan esta dura realidad.
“Es un paso significativo para nosotros y estamos entusiasmados de extender nuestra ayuda a más personas en necesidad”, finalizó.