Miami (EE.UU.), 23 jun (EFE).- La afición de la Celeste desembarcó este domingo en Miami para acompañar a Uruguay en su debut en la Copa América contra Panamá y para respaldar a su equipo en busca de su título 16 en este torneo.
Desde horas antes del pitido inicial, una multitud de fanáticos uruguayos se concentró en los alrededores del Hard Rock Stadium de Miami al grito de “Volveremos a ser campeones como la primera vez” o “Uruguay nomás”.
Para combatir el húmedo y agobiante calor no faltaron las cervezas y para que nadie se quedara sin hambre numerosos coches dispusieron de parrillas para cocinar chorizos y otras delicias.
La música no dejó de sonar en un ambiente de auténtica fiesta y máxima deportividad: la afición de Uruguay era mayoritaria sobre la de Panamá, pero reinó el ambiente cordial entre los seguidores de ambas selecciones (incluso se vieron algunos grupos de ambos conjuntos tomados de la mano).
El color celeste inundó los alrededores del estadio de los Miami Dolphins de la NFL ya fuera en camisetas, pelucas, maquillajes, banderas…
Entre los nombres y dorsales preferidos de la afición, los de Luis Suárez, Federico Valverde e incluso un Edinson Cavani que ni siquiera está entre los convocados por su renuncia a la selección.
Pero también se vieron camisetas de otros equipos como las del Peñarol o las del Barcelona con el nombre de Ronald Araújo.
“La Celeste la seguimos a donde sea”.
Así se expresó en declaraciones a la Agencia EFE Gustavo Rojas, un uruguayo de nacimiento, que lleva 50 años viviendo en Toronto y que no dudó ni un segundo en viajar desde Canadá a Miami para apoyar a su selección.
“Uruguay siempre va con muchas ganas, pero creo que este año tenemos mucho fútbol también, que nos va a ayudar”, consideró.
“Siempre jugamos con esa garra charrúa, pero ahora le sumamos la calidad de los jugadores que tenemos y creo que estamos en el Top 3 de Sudamérica sin lugar a duda”, cerró.